El instituto de A Cachada se alzó con el premio de un concurso de robótica

M.?G. Ribeira / La Voz

OURENSE CIUDAD

18 feb 2014 . Actualizado a las 07:00 h.

La sede de la Fundación Barrié en A Coruña fue escenario la semana pasada de los talleres enmarcados en el Concurso Galego de Robótica, un certamen en el que este año participaron cerca de 1.300 alumnos de más de una treintena de centros y en el que un instituto de la comarca ha logrado inscribir su nombre: A Cachada, de Boiro. El buen hacer y las habilidades de cuatro alumnos han colocado al recinto educativo en lo más alto del palmarés del concurso.

Ya el año pasado, los alumnos del centro boirense se quedaron a las puertas de obtener el primer premio firmando un segundo puesto compartido con los institutos de Tomiño y Canido de Ferrol. Y en esta edición, la sexta, la representación de A Cachada ha podido sacarse la espina que tenía clavada sumando un total de 56 puntos, suficientes para encabezar la clasificación en la categoría de segundo a cuarto curso de ESO.

Por detrás de los boirenses, quedaron los participantes del instituto Ramón María Aller de Lalín, con 52 puntos, y los escolares del Ramón Otero Pedrayo de Ourense, que sumaron 50 puntos.

Cuatro estudiantes

Los responsables del triunfo logrado por el centro boirense son Antía Dieste Galván, Diego Fernández Vázquez, Jesús López Fernández y Alexis Mosquera Cespón, los cuatro estudiantes de A Cachada que demostraron haber adquirido mayores conocimientos sobre los robots y su funcionamiento.

Los talleres y el concurso que dan forma a la iniciativa buscan hacer comprensible y acercar el mundo de la robótica a los alumnos haciéndoles partícipes del montaje y programación de un robot con un kit de Lego.

Para sumar puntos, los participantes debían ir superando una serie de ejercicios y resolviendo los retos que se les planteaban, y este año los que mejor lo han hecho han sido los estudiantes boirenses.

El concurso, que vivió su sexta edición, está organizado por la Institución Galega da Ciencia en colaboración con la Fundación Barrié.

Los participantes en el certamen debían resolver retos de robótica con kits de Lego