Precios al alza en la segunda jornada de trabajo en la ría de Noia tras el parón

M.G. NOIA

NOIA

30 oct 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

Preocupaba en la cofradía de Noia, y en el sector marisquero en general, la reacción de los compradores tras el parón por el virulento episodio de toxina. Decía el patrón mayor que habría que ganarse su confianza poco a poco, pero a la vista de la facturación en las lonjas, parece que al berberecho no le faltan novias en las subastas. Si los precios en el primer día de la vuelta al trabajo fueron razonablemente buenos, ayer, en la segunda jornada de faena, la cotización fue al alza.

Así, el precio del berberecho de primera calidad se situó ayer a 14,26 euros de media, casi dos euros más que el lunes. También subió la cotización de la almeja fina, que, aunque por ahora tiene una presencia testimonial en la lonja, superó los 60 euros.

En cuanto a las capturas, la abundancia de marisco no defrauda a los productores. No en vano, ayer se subastaron 43,8 toneladas de bivalvo, una cifra inferior a la del lunes y a la del primer día de campaña, pero nada desdeñable, sobre todo teniendo en cuenta que esta semana el número de profesionales que salieron a faenar es inferior al habitual. El colectivo de a pie bajó a la playa el lunes, pero se encontró con buena parte del berberecho muerto, así que unas 430 mujeres siguen sin trabajar.

La semana que viene

Inicialmente se dijo que el sector de a pie volvería a los arenales hoy mismo, sin embargo, finalmente no será hasta la semana que viene cuando retomen la actividad.

La presidenta de las mariscadoras explicaba ayer que se decidió retrasar hasta el lunes el regreso a los bancos porque habrá mejor marea, lo que les permitirá adentrarse más en la ría: «O luns xa imos para unha zona segura, porque os barcos xa foron por alí e din que o berberecho está bo».

La previsión es que el sector de a pie inicie la jornada el lunes a las ocho de la mañana. Sobre lo ocurrido esta semana, cuando el colectivo bajó a la playa de madrugada, la presidenta de la agrupación explicó que se tomó esta decisión porque «eran días extraordinarios, levábamos moito tempo parados e a xente está bastante desesperada. Hai moitas familias que só viven disto e a xente necesita traballar».