El bajo precio y la poca demanda de pulpo pone en aprietos a los pósitos

Ana Gerpe Varela
A. Gerpe RIBEIRA / LA VOZ

BARBANZA

MATALOBOS

En la rula de Porto do Son no se vende cefalópodo desde junio y el patrón mayor dice que la supervivencia de la entidad está amenazada

21 feb 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

La escasa demanda de pulpo, que ha provocado que las distribuidoras todavía tengan una importante cantidad de producto sin vender, y la entrada de capturas procedentes de Portugal y Marruecos, a precios más bajos que las autóctonas, son las causas que los profesionales del mar atribuyen al bajo precio del cefalópodo, cuya cotización es sensiblemente inferior a la del año pasado en esta época. La situación es especialmente delicada en Porto do Son, en cuya rula no se subasta pulpo desde junio. El patrón mayor, Tomás Fajardo, reconoce que este hecho pone en aprietos a la entidad. También en Muros miran con preocupación este hecho.

El cefalópodo constituye el 70% de los ingresos del pósito y Tomás Fajardo indica que urge encontrar otras fuentes de financiación: «Ou buscamos medidas ou teremos que pechar». Fajardo contactó con diversos compradores, pero indicaron que no les interesaba acudir a Porto do Son porque podían conseguir el producto a precios más bajos. Por su parte, los profesionales sonenses prefieren comercializarlo en Ribeira porque los precios son más altos.

El patrón mayor indica que las ventas que se efectúan en Ribeira no revierten en Porto do Son porque, en el caso del pulpo, en Ribeira no se cobra a los armadores el 1%, cosa que sí se hace con el percebe: «Os armadores deben colaborar porque o que descargan en Porto do Son e venden fóra non deixa ingresos».

Menos de cinco euros

Tanto en Ribeira como en Muros, el valor medio del cefalópodo está actualmente por debajo de los cinco euros. Hace un año, la cotización media en la rula ribeirense superaba los siete y en Muros rondaba los seis.

El administrador de la lonja de Ribeira, José Manuel Orellán, precisó que la mayor parte de la mercancía va para empresas frigoríficas que, al tener producto acumulado, adquirido a un valor mayor que el actual, frenan la subida de precios.

El consumo en fresco ha caído al existir una menor demanda por parte de los restaurantes, cuya actividad se resiente notablemente por la recesión.

Por su parte, el patrón mayor de Muros, Daniel Formoso señala que los ingresos han descendido de forma importante: «Ao caer o prezo o porcentaje que se cobra polas ventas tamén baixa». El dirigente indica que ya están pasando apuros económicos y que la situación del pulpo es una más de las muchas que padecen los pósitos: «As confrarías imos ter que facer algo para seguir estando aí».