Hombres y caballos revivieron una lucha ancestral en A Curota

Ana Gerpe Varela
A. Gerpe RIBEIRA / LA VOZ

BARBANZA

Durante la rapa pudieron vivirse momentos de gran emoción.
Durante la rapa pudieron vivirse momentos de gran emoción.

Unos 150 equinos fueron rapados por los aloitadores en el tradicional curro

09 jul 2012 . Actualizado a las 07:00 h.

De nuevo, el monte de A Curota mostró ayer su lado más salvaje al revivir, en el tradicional Curro da Barbanza de A Pobra, la ancestral lucha entre hombres y caballos. Hubo que aguardar hasta que se levantase la niebla, hacia las once de la mañana, para salir en busca de los animales. Siete hombres se encargaron de esta tarea y, a mediodía, unos 150 caballos ya estaban encerrados en el recinto en el que, horas más tarde, se desarrollaría la rapa.

Todos los ejemplares estaban marcados y con el correspondiente chip, afirma el presidente de la Asociación de Gandeiros Monte de Posmarcos, Manuel Boo, promotora de la cita. Este profesional señaló que la buena organización permite que, en poco tiempo, logren reunirse bastantes ejemplares.

El día fue mejorando y el sol empezó a ganar la batalla a las nubes, favoreciendo la afluencia de personas al curro. En el lugar de la celebración no faltaba de nada, bebida y comida. Por seis euros podía degustarse una ración de churrasco o, si se prefería, una de carne ao caldeiro. Quienes lo deseasen también tenían pulpo.

A las cinco de la tarde, una docena de aloitadores comenzaron a echar el pulso a los equinos, inaugurando oficialmente la rapa. Dos horas después, la faena todavía continuaba.

Carrera de burros

Otro de los atractivos de la jornada era una carrera de burros. Finalmente comparecieron dos a la cita y Manuel Boo determinó que la prueba, dotada con un premio de 50 euros y otro de 30, se llevase a cabo.

En el recinto hubo algunas actividades para los críos, que, además, tuvieron ocasión de divertirse con un hinchable instalado por la organización. Manuel Boo se mostraba satisfecho con la afluencia de público durante la tarde, algo que atribuía a la mejoría del tiempo a lo largo de la jornada.

Además de público interesado en la rapa, tampoco quisieron perderse esta cita el secretario xeral de Medio Rural, Tomás Fernández-Couto, que estuvo acompañado por el alcalde, Isaac Maceiras, y por el diputado Santiago Freire. Los tres conversaron con el presidente de la entidad organizadora.