Javier Evaristo Pose negó en el juicio haber maltratado al emrpesario para robarle
22 may 2015 . Actualizado a las 05:00 h.«Ratifícome en que rexeito calquera tipo de violencia. Xamais entraría nunha casa na que non fora invitado». Javier Evaristo Pose aprovechó la última palabra que le concedió la Audiencia de Pontevedra para rechazar haber agredido, en diciembre del 2012, a un bodeguero de Tremoedo (Vilanova): «Síntome vítima de todo isto».
El fiscal, minutos antes, había anunciado que mantenía los cargos iniciales, que implican la petición de trece años de prisión por robo y lesiones con deformidad. La acusación particular manifestó que también solicitaba penas parejas, si bien evitó concretarlas, mientras que la defensa solicitó la absolución de su cliente, al tiempo que incidió en que las lesiones que presentaba el bodeguero son de carácter leve y no tienen afección a su movilidad.
Asimismo, volvió a insistir en que se anulen las pruebas de ADN, una petición que el fiscal consideró extemporánea. En este sentido, la letrada puso en cuarentena la caducidad de los restos biológicos que permitieron vincular a Javier Evaristo con un mechero encontrado debajo de la cama de la víctima. La abogada apuntó que existen otras alternativas que explicarían la presencia de este objeto en el lugar donde fue hallado.
A este respecto, el acusado insistió en que «non lle atopo explicación», al tiempo que manifestó estar «pagando as consecuencias de algo que eu non fixen».