El arousano apresado en Cambre con cinco kilogramos de hachís es un agente prejubilado de la Policía Local de Vilagarcía

La Voz VILAGARCÍA / LA VOZ

VILAGARCÍA DE AROUSA

El policía, muy conocido en la comarca de O Salnés por su afición al mundo de las motos

30 mar 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

El sábado, un vecino de Vilagarcía y una mujer natural de Padrón caían en Cambre dentro de una operación desarrollada por la Guardia Civil contra el tráfico de hachís en la provincia de A Coruña. En su poder se hallaban cinco kilogramos de la sustancia derivada del cannabis, que motivaron el ingreso en prisión del individuo, cuya identidad trascendió esta semana. Se trata de Jesús G., un agente prejubilado que prestó sus servicios en la Policía Local de la capital arousana hasta hace unos meses.

El policía, muy conocido en la comarca de O Salnés por su afición al mundo de las motos, sufre desde hace tiempo una enfermedad en ambas caderas que le impedía desarrollar su trabajo en condiciones. Esta es la razón por la que, tras encadenar varias bajas médicas, acabó desvinculándose del cuerpo municipal, con el que ya no guarda relación alguna.

Los problemas de salud que acarreaba no le impidieron, sin embargo, campear a sus anchas en diferentes poblaciones de A Coruña. Esto es, al menos, lo que sospecha la Guardia Civil, que atribuye al vilagarciano, acusado de un delito contra la salud pública una generosa capacidad de movimientos a través de la geografía coruñesa.

La investigación se inició en octubre, cuando agentes de la Guardia Civil fijaron su mirada en los trapicheros que operaban en el entorno de A Coruña. Las pesquisas y las detenciones practicadas entre los vendedores a pequeña escala de la zona condujeron a la conclusión de que un proveedor común abastecía a la mayoría de ellos.

Provisión a trapicheros

La operación, conocida como Upper, se centró, entonces, en la identificación y captura de este individuo o grupo de individuos, que supuestamente ejercían un papel intermedio. Fue así como cayeron el antiguo agente arousano y la mujer, que quedó en libertad, con la obligación de presentarse cada semana en los juzgados de A Coruña. Además de los cinco kilos de hachís y del inhibidor de frecuencias para móviles que estaban en su poder, los registros practicados en Padrón y Vilagarcía dieron como resultado la aprehensión de más sustancias psicotrópicas, material de corte, munición de 9 milímetros, unos grilletes, un cargador y cuatro básculas de precisión.