La provisionalidad en la gerencia del hospital se mantendrá al menos hasta enero

s. g. VILAGARCÍA / LA VOZ

VILAGARCÍA DE AROUSA

11 dic 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

nunca, en los quince años transcurridos desde que abrió sus puertas, se había encontrado el Hospital do Salnés en una situación como la que atraviesa desde que Bibiano Fernández Arruti renunció a su gerencia. La decisión de asignar las responsabilidades del cargo a la doctora Ana Ogando, evitando al mismo tiempo nombrarla a todos los efectos, deja al centro arousano en un estado de interinidad que dispara mil y una especulaciones. En principio, y aunque estas cosas cambian como el viento, Ogando, que en su momento ejerció como directora médica del complejo comarcal, no parece tener grandes intenciones de consolidarse en el cargo. Por otra parte, la propia evolución de la gerencia, con una subordinación creciente a Pontevedra, exige por pura lógica que quien la ejerza mantenga una importante unidad de criterio con el responsable de la EOXI. En círculos médicos se maneja la posibilidad de que los cambios se sucedan en cadena y puedan afectar a la máxima responsabilidad del área integrada. Algunos se explican, así, que la designación definitiva en Vilagarcía se demore a la espera de un hipotético relevo conjunto. Sea como fuere, nadie espera movimientos hasta enero, una vez transcurrido el período navideño.

Con nueva gerencia o sin ella, la pérdida de autonomía de O Salnés continúa generando malestar entre los profesionales del hospital. Y con ello tendrá que lidiar su próximo responsable, sea quien sea y en la condición en la que sea investido. Sin presupuesto propio, poco se puede hacer.