La zona comercial de la estación de ferrocarril se limitará a tres locales

Serxio González Souto
serxio gonzález VILAGARCÍA / LA VOZ

VILAGARCÍA DE AROUSA

martina miser

La reforma a punto de concluir establece un único punto de acceso a los andenes

24 sep 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Hubo un tiempo en el que el Ministerio de Fomento aspiraba a transformar radicalmente la estación de ferrocarril de Vilagarcía. Demoler una de sus dos edificaciones laterales y levantar en su lugar un amplio vestíbulo de 500 metros cuadrados en torno al que disponer toda una serie de servicios. Entre ellos, una zona comercial de cierta relevancia. Esa era la idea que funcionaba entre los responsables del ministerio en el 2009. Nunca pasó del papel. Siete años más tarde, la reforma que en realidad se ha llevado a cabo resulta mucho más modesta. Probablemente bastante más adecuada a las dimensiones y necesidades de las instalaciones arousanas. La inversión ejecutada por Fomento, englobada en una partida genérica para el conjunto del Eixo Atlántico, concibe, por ejemplo, un espacio mucho menor para aquella derivada comercial. Finalmente, el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (ADIF) apenas pondrá en el mercado tres locales, una oferta muy alejada de proyectos como el que fracasó de forma estrepitosa en Pontevedra.

Uno de dichos establecimientos, el más pequeño, con unos quince metros cuadrados de superficie, se dispone en la fachada exterior de la estación. Se diría ideado para una oficina de alquiler de automóviles, aunque de momento no ha trascendido qué actividad concreta albergará. Los otros dos se ubican en el interior del vestíbulo, como parte de la galería resultante de acristalar los viejos arcos de piedra que se abrían a los andenes.

En este punto radica otra de las grandes novedades que la reforma trae aparejadas: el acceso a los andenes se llevará a cabo a través de una sola puerta, al final del corredor en el que se disponen los dos locales comerciales acristalados. El sistema está preparado para la instalación de un escáner como forma de control del equipaje. Cuestión distinta es que finalmente se dote o no a Vilagarcía de este servicio.

Por último, la parte posterior de la cafetería, desde la que tampoco se podrá acceder ya al área de andenes, se comunicará con el vestíbulo y los baños a través del resto de la galería.