Los residuos de la Festa da Auga se acumulan en el puerto deportivo

Antonio Garrido Viñas
antonio garrido VILAGARCÍA / LA VOZ

VILAGARCÍA DE AROUSA

mónica irago

Decenas de botellas y de plásticos flotan en las aguas de la rada vilagarciana

19 ago 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

La resaca de la Festa da Auga tarda mucho más en pasar bajo el mar vilagarciano. Los restos de la multitudinaria celebración se acumulan en los espigones del puerto deportivo y flotan por doquier en una imagen nada edificante para una de las zonas de Vilagarcía que más viandantes atrae.

El panorama es especialmente desagradable en la dársena en la que están los pantalanes para las embarcaciones deportivas y el restaurante. Allí, sobre las piedras de la escollera, se acumulaban en la mañana de ayer decenas de botellas y recipientes de plástico de todo tipo. Flotando sobre las aguas también se veían numerosos restos. Marina Vilagarcía es la concesionaria y, por lo tanto, la responsable de realizar el mantenimiento. Un portavoz de la firma reconocía la existencia del problema que asegura, se viene produciendo desde hace bastantes años, y afirmaba que su personal se está encargando de retirar la basura. «Hemos llegado a quitar hasta sillas y mesas», apuntan desde la empresa.

El problema, explican desde Marina Vilagarcía, es que la tarea no es sencilla puesto que las mareas se encargan de introducir en la dársena los restos que llegan desde flotando desde la playa y las labores pueden prolongarse durante bastantes días.

O Centenario

La situación se repite en la lámina de agua que está enfrente del parque de O Centenario. Allí las botellas también se acumulan junto a una pequeña barca que está varada y destrozada, al lado del inefable neumático e incluso de una rama de palmera. En las escaleras que dan acceso al mar desde el parque de O Centenario los recipientes se cuentan por docenas.

Esa zona sí que es responsabilidad de la Autoridad Portuaria y fuentes del organismo aseguran que los operarios acuden cada día a limpiarla pero que, al igual que sucede en la dársena de los pantalanes deportivos, las mareas complican mucho la labor porque continuamente entran desperdicios en la rada vilagarciana. En todo caso, desde el organismo aseguran que las labores de limpieza se mantendrán