Vaibike!, las bicicletas toman las calles de la capital arousana

Las bicicletas vuelven para quedarse a Vilagarcía, llega Vaibike!. A pesar de aparecer con unos días de retraso, Vaibike! ya es una realidad en la ciudad. Hace ya cuatro años que las ruedas de las bicicletas públicas dejaron de recorrer la capital arousana pero Ravella apuesta por recuperar la iniciativa. La eliminación de este servicio fue una de las decisiones que tomó el gobierno de Tomás Fole, a pesar de que los vecinos, como José Juan González, consideran que «nunca deberían haber quitado las bicicletas», y añade que «funcionaban bien, muy bien».

Aunque el calor no anime a pasear por las calles, los vecinos arousanos están muy animados a seguir esta iniciativa del Concello, ya que «es una forma de hacer ejercicio», comenta Begoña Hierro, una vecina interesada, que promete sumarse ya esta semana al proyecto del Concello. Evitar atascos, pasar los días de verano en familia o seguir un «plan de vida» más sano, son algunas de las razones que más animan a los vecinos a subirse a la bicicleta. Son muchos los que opinan que el sedentarismo se está instalando, cada día más, en «nuestras vidas», y sacar a las calles este medio de transporte tan mítico «ayuda a que los más jóvenes entiendan el mundo de una manera más saludable». Y es que a parte de todos sus beneficios, el precio al que se ponen a disposición las bicicletas van desde los tres euros por jornada, hasta los veinticinco, si el abono es anual.

Disfrutar del biciclo es algo muy sencillo. Basta con acercarse hasta las estaciones en las que se encuentran aparcadas, O Cavadelo, Vilaxoán, Carril, O Piñeiriño o la estación de Renfe, e introducir los datos pertinentes, directamente, en los tótems que hay en todas las paradas y, finalmente, establecer el pago con tarjeta bancaria. Cuando se haya efectuado el cobro, el usuario recibirá una clave con la que poder disfrutar de su primer día sobre ruedas. «La forma de pagar es muy cómoda, después del primer día mandan una tarjeta», asegura José Juan. Las facilidades que Vaibike! presta al municipio hace que los vecinos respondan positivamente y no duden en pasarse «mañana mismo» a por su abono. Sin embargo, Carlos y Martín, unos vecinos de diecisiete años del municipio, aseguran que «fue un chasco no poder andar en ellas ya el fin de semana», comentan.

Y aunque la propuesta llega para todas las edades, los niños son los que más contentos se muestran con la aparición de sus nuevas vecinas. «No sé muy bien cómo van pero sé que pagando muy poco, papá y mamá consiguen una tarjeta y me dejan ir en bicicleta por ahí con mis amigos», comenta Hugo, un pequeño de la zona, y añade que «se puede ir con muchas bicis a la vez», para potenciar y facilitar las salidas en familia o grupos, con la misma clave o tarjeta. También los adolescentes, como Carlos, ven provecho en la propuesta «al no tener moto, la bicicleta puede hacer de comodín».

Pero es que las tecnologías a veces juegan malas pasadas, y esto fue lo que le sucedió a Ravella. Tras varias semanas de promoción, Vaibike! no llegó cuando se le esperaba. En el último momento, la conexión a la plataforma bancaria, falló y no permitía a los usuarios darse de alta el sábado en el plan. A pesar de este problema, los vecinos reconocen estar «felices» con Vaibike!.

«Las bicicletas no deberían haber desaparecido nunca, funcionaban muy bien»

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