Una APP con raíces arousanas facilita la vida a las personas con síndrome autista

Rosa Estévez
rosa estévez VILAGARCÍA / LA VOZ

VILAGARCÍA DE AROUSA

Nacho Rey, coordinador del servicio de empleo de Bata, muestra cómo funciona Mefacilyta.
Nacho Rey, coordinador del servicio de empleo de Bata, muestra cómo funciona Mefacilyta. m. ferreirós< / span>

Bata colabora con Vodafone en el diseño de una aplicación que ya se está probando en Vilagarcía

10 feb 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Hace año y medio, Bata se embarcó en una aventura tecnológica. La Fundación Vodafone se puso en contacto con la asociación arousana para pedirle su colaboración en el diseño de Mefacilyta, una nueva aplicación que pretende, justamente, lo que su nombre indica: facilitarle las cosas a las personas con autismo, con síndrome de Down o con otras discapacidades. Y los responsables de Bata, sin pensárselo dos veces, se pusieron manos a la obra.

El trabajo ha consistido en diseñar una APP para dispositivos móviles (tablets y teléfonos inteligentes) que permite, a través de la lectura de códigos QR, acceder a apoyos visuales que «facilitan la comunicación y la comprensión a las personas con trastornos del espectro autista u otro tipo de discapacidades», según explica Nacho Rey, coordinador del servicio de empleo de Bata.

El trabajo realizado ya está dando sus frutos. Y los está dando, además, en un terreno complejo: la construcción de un mercado laboral realmente inclusivo. La muestra la encontramos en el Centro polivalente Ana María Parada, un gabinete de atención psicopedagógica en el que, desde el mes de octubre, trabaja una de las usuarias del servicio de empleo de Bata.

La joven fue contratada a media jornada para realizar los trabajos de limpieza y mantenimiento de las instalaciones de Ana María Parada. Acude puntual a su puesto de trabajo, acompañada de un preparador laboral que la guía en sus tareas, la supervisa y la monitoriza. El trabajo de ambos ha sido crucial para recabar datos con los que construir la APP. «La necesidad de organizar y pautar el trabajo diario de esta profesional ha sido la clave a la hora de dar forma a la aplicación», explican desde Bata.

La jornada en imágenes

Siguiendo el trabajo diario, se ha ido elaborando poco a poco un sistema de etiquetas con códigos QR que la joven puede leer con su teléfono móvil, accediendo a un catálogo de imágenes que le indica qué tipo de tareas debe realizar cada día en las distintas áreas en las que se divide el gabinete. «Cada espacio, los baños, las oficinas, las consultas, tiene en su puerta un código QR que lleva asociada una colección de imágenes que le dicen qué tiene que hacer en cada sitio».

Gracias a esa aplicación, la joven ya no precisa estar acompañada permanentemente por su preparador laboral, lo que le da una mayor independencia y, a la postre, más confianza en sí misma y en sus capacidades.

Ese es precisamente, uno de los aspectos que más destaca Ana María Parada. Ella está encantada de que su empresa haya servido como «conejillo de indias» para el diseño y desarrollo de la nueva aplicación. Aunque los códigos QR llevan poco tiempo funcionando, sus resultados ya se notan. «Lo que hacen es reducir el tiempo de apoyo, lo que para la trabajadora supone una independencia impresionante», explica. Ella, que por su profesión sabe de lo que habla, considera que las nuevas tecnologías han llegado para quedarse, y que se les puede sacar mucho partido a la hora de facilitar la integración real de las personas que tienen algún tipo de discapacidad. «Hoy por hoy, el uso de la tecnología es fundamental también en este campo», explicaba ayer.

Al alcance de todos

La experiencia acumulada en el Centro polivalente Ana María Parada, asegura Nacho Rey, está siendo de lo más positiva. «Ha superado con creces las expectativas creadas», dicen desde Bata, así que ya se está estudiando la implantación de este software en otros centros. A finales de año, si todo sale según lo previsto, la Fundación Vodafone lanzará Mefacilyta para todo el mundo.