Vilagarcía sienta un precedente con las cuentas aplicable en todos los concellos

Serxio González Souto
SERXIO GONZÁLEZ VILAGARCÍA / LA VOZ

VILAGARCÍA DE AROUSA

Cualquier gobierno municipal puede aprobar sus presupuestos al margen del pleno

02 feb 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Dicho y hecho. La comisión de gobierno del Concello de Vilagarcía aprobó ayer inicialmente los presupuestos municipales del año en curso. Lo hizo después de que el documento fuese rechazado el jueves por el pleno (ocho apoyos del PSOE frente a los once votos negativos que sumaban los concejales presentes en la sesión de Partido Popular, Esquerda Unida, BNG y Somos Maioría). El mecanismo empleado para ello constituye uno de los puntos más controvertidos de la Ley 27/2013 de Racionalización y Sostenibilidad de la Administración Local, al permitir a los gobiernos de los ayuntamientos sacar adelante sus cuentas anuales en solitario, disfruten o no de una mayoría suficiente en sus respectivas corporaciones.

Hace semanas que en la capital arousana se daba por hecho que el grupo socialista recurriría a esta vía en caso de no alcanzar acuerdos con ninguna otra formación. Así lo anuncio el propio alcalde, Alberto Varela, en vísperas de una sesión ante la que el conjunto de la oposición había anticipado su voto en contra. Sucede que en el imaginario político de Vilagarcía se había asociado esta medida a la existencia de un plan de saneamiento económico como el que el bipartito conservador que comandaba Tomás Fole puso en marcha durante el mandato anterior. Sin embargo, no es así. La reforma legal ejecutada en el 2013 es clara en este sentido: «Excepcionalmente, cuando el pleno de la Corporación Local no alcanzara, en una primera votación, la mayoría necesaria para la adopción de acuerdos prevista en esta ley, la junta de gobierno local tendrá competencia para aprobar el presupuesto del ejercicio inmediato siguiente, siempre que previamente exista un presupuesto prorrogado», de acuerdo con la nueva redacción que se da a la disposición adicional decimosexta de la Ley Reguladora de las Bases de Régimen Local.

Para los gobiernos en minoría

Es decir, ese requisito de un plan de equilibrio financiero, del que se habló en los prolegómenos de la reforma, en realidad nunca llegó a ser incorporado a la ley. En otras palabras, cualquier gobierno municipal en minoría puede emular a Ravella y dar vía libre a sus presupuestos al margen de las votaciones plenarias.

La decisión de Varela no ha sentado bien a su predecesor en la alcaldía, que no duda en tirar con bala contra Ravella. Sin embargo, poco puede argumentar el portavoz del PP contra lo ocurrido ayer en la junta de gobierno sin atacar también a su compañero de partido, Cristóbal Montoro, impulsor de la nueva norma.