Cortegada gana protagonismo al duplicar sus visitantes en cuatro años
VILAGARCÍA DE AROUSA
En 2015 acudieron a la isla 9.369 personas, un 30 % más que el ejercicio anterior
21 ene 2016 . Actualizado a las 05:00 h.Poco a poco, gracias sobre todo al empeño de las empresas que han ido naciendo a su sombra, la isla de Cortegada está dejando de ser la gran desconocida de las Illas Atlánticas. Según los datos del Parque Nacional, durante el año 2015 pisaron el bosque flotante de Carril 9.369 personas. Sigue la cifra muy lejos de los 293.956 visitantes que arribaron a Cíes, o los 83.334 contabilizados en Ons. Pero Cortegada se tutea con Sálvora (9.321 visitantes) y, sobre todo, sale victoriosa en su propia carrera: año tras año, sigue creciendo como destino de un turismo que busca la naturaleza y el paisaje sobre todas las cosas.
Hacer visibles las islas menos conocidas del parque es uno de los objetivos que los responsables de este se habían marcado. Para ello se han apoyado, y mucho, en las pequeñas empresas de ocio y tiempo libre que han ido naciendo en la ría de Arousa. Firmas como Corticata o Alvamar organizan cada año un sinfín de actividades que tienen como objetivo descubrir al gran público los secretos de una isla que, pese a estar a un tiro de piedra de la costa, siempre ha quedado demasiado lejos de los circuitos turísticos, de los recorridos programados.
Rompiendo con las estaciones
Son muchos los motivos por los que Cortegada merece una visita. Un simple recorrido guiado por ella permite ver con otros ojos las ruinas del pueblo y de la ermita, y admirarnos con una naturaleza que, gracias a las vicisitudes que marcaron el destino de la isla, ha crecido lejos de la tutela humana. La riqueza micológica de la isla, o la observación de estrellas, atrae a un número creciente de visitantes. Y de voluntarios que trabajan para mejorar la zona. Y de científicos que buscan allí datos para todo tipo de estudios. Según los datos facilitados por el parque, 960 personas visitaron Cortegada el año pasado por motivos que no estaban relacionados con el ocio, sino con la investigación o la realización de todo tipo de trabajos.
La variedad de actividades que se realizan teniendo como base la isla han logrado romper la estacionalización de los negocios que giran en torno a ella. Y es que, aunque los meses de julio y agosto siguen siendo, indiscutiblemente, temporada alta, el ir y venir hacia el bosque flotante de Carril se abre paso ya en otras fechas del año, para satisfacción de quienes han convertido la exploración de los recursos naturales de Arousa en su fuente de ingresos.
Las empresas que mueven gente hacia Cortegada han generado este año un tráfico de 3.906 personas. Sin embargo, el grueso de las visitas sigue llegando en medios de transporte privado, bien sean empresas contratadas a tal fin, bien embarcaciones de su propiedad, bien piraguas u otro tipo de artilugios que permitan realizar la singladura.