«A los que duden de mi fichaje intentaré hablarles en la cancha»

Amra Dapo llegaba ayer a Vilagarcía cerca de las dos y media de la tarde. Lo hacía con todos los trámites federativos en regla para poder debutar hoy (Pabellón de Fontecarmoa, 19.30 horas) con su nuevo equipo, el Cortegada, frente al penúltimo clasificado; un ADBA de Avilés con la vilagarciana Andrea Ríos en sus filas tras su paso en falso por un Al-Qázeres con el que ni llegó a debutar. Dapo, ex internacional con Croacia, tiene la encomienda de sustituir a la cortada Mame Coumba Sy como pareja interior de Amy Syll. Una labor que acomete a escasos días de cumplir los 39 años, y tras trece meses sin jugar un solo partido oficial después de poner fin a dos temporadas y media en el KK Play-Off Sarajevo de su ciudad natal -tiene la doble nacionalidad croata y bosnia-, y con menos de un mes de vuelta a los entrenamientos en las filas del Impuls, también de Sarajevo.

-¿Qué ha venido a hacer una ex internacional por Croacia con su currículo deportivo a este Cortegada, metido en la pelea por salir de la zona de peligro de la Liga Femenina 2?

-Yo he venido aquí para ayudar al equipo. Mi agente me animó hace un mes a volver a jugar, y probé y me encontré de nuevo con la ilusión por el baloncesto. Estas dos temporadas y media que jugué en Sarajevo lo hice por estar cerca de casa, con mi familia y mis amigos. Estaba en el camino de dejarlo. Entonces tenía ofertas de España, de Brasil, pero no quería salir de mi país. Ahora mi agente me animó, y yo me veo capaz de aportar cosas. Por recomendación de mi agente me vine aquí. Este es el tipo de equipo en el que él piensa que voy a aportar el máximo.

-Habrá quien en Vilagarcía albergue dudas sobre el rendimiento de una jugadora que en cuestión de días cumplirá los 39, y que llega tras un año sin competir...

-No voy a decir nada. Voy a intentar hablar en la cancha. Por eso estoy aquí.

-¿Qué le aportará Amra Dapo al Cortegada?

-Tengo que ver el equipo, y hablar con el entrenador. Dependerá de lo que me pidan.

-Alero de 1,84, en Vilagarcía la requieren para ejercer de cuatro. En todo caso, un papel que no le resulta extraño...

-Sí, sí. En muchísimos equipos jugué de cuatro. En unos jugué como cambio, unos minutos, en otros todo el tiempo. Me siento cómoda en esa posición.

-En la mayoría de sus nueve temporadas en la Liga Femenina se enfrentó al Cortegada. ¿Que imagen guardaba de aquel equipo que llegó a disputar competición europea, y cómo lo ve hoy?

-Eso fue hace muchos años. Necesito entrenar y jugar partidos para hacerme una idea. Recuerdo que en mi tercera temporada en Hondarribia el entrenador nos hizo ver el partido con el Cortegada entero en el viaje de vuelta de Vilagarcía, pero con pausas, explicando esto y esto y esto [ríe]. Íbamos de favoritas, y perdimos.

-¿Conoce la Liga Femenina 2?

-Sé algo. He hablado con mi técnico y con mi agente. Tenemos un trabajo importante en los próximos tres partidos.

-¿Lista para jugar mañana -por hoy-?

-Sí. Sí, sí. Por eso vine.

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