Con la zaga marcando la mitad de los goles, el club sigue su búsqueda sin pausa pero sin prisa de otro delantero más
28 sep 2016 . Actualizado a las 08:49 h.Fran Matos abría el domingo el marcador en el derbi que enfrentaba a su actual equipo, el Arousa, y un Ribadumia al que había capitaneado la temporada anterior. Lo hacía en calidad de lateral derecho, una posición en la que parece querer encuadrarlo Jorge Otero aún cuando el talento del vilagarciano ha venido causando en el último año auténticos estragos entre sus rivales en la zona de ataque. Sergio Santos, que acabaría el encuentro en funciones de mediapunta, subía el 2-0 en el minuto 10 formando pareja de mediocentros con Sidibé. Ambos, Matos y Santos, elevaron a 8 la producción goleadora del Arousa en las seis primeras jornadas de Liga de Tercera División. Ocho dianas firmadas por otros tantos futbolistas, con la nómina de delanteros como la menos productiva en este capítulo siendo Sylla y Eloy los únicos en haber visto puerta. Rivas, Aitor Díaz y Suso, desde la defensa, y Sidibé, apostado en la medular, completan la autoría de la inusual obra colectiva en un equipo de fútbol. Sobre todo cuando Hugo Soto, el único delantero centro puro del plantel en ausencia de Alberto Cabanyes, baja por una operación de apendicitis, todavía no sabe lo que es sacar el balón del interior de la portería de un rival en lo que va de Liga.
El entrenador arlequinado, Jorge Otero, se refería a la circunstancia comentando que «ten varias lecturas. Para min é algo bo que os goles se repartan. Que todos os xogadores cheguen a posicións de remate, desde laterais a mediocentros. Estamos a conseguir que se reflicta o que queremos ver no xogo do equipo». Dicho lo cual, el técnico del Arousa añade que «me gustaría que Hugo -Soto- marcara, porque o está a merecer, e outros coma Sylla e Eloy levasen máis goles, porque tamén levan feito méritos para iso, e un traballo fantástico xunto con Hugo».
En espera del regreso de Cabanyes y de Manu Justo, este baja tras la primera jornada por una fractura de clavícula, a los que Otero aún calcula de dos a tres semanas para poder volver a jugar, al Arousa no le queda otra que seguir confiando en la verticalidad de las dotes goleadoras de su plantel, con el 60 % de sus jugadores de campo empleados y sanos habiendo hecho diana. La alternativa, la llegada del delantero polivalente que sigue buscando el club desde el inicio de pretemporada, parece ir para rato. Porque «debemos fichar algo que marque a diferenza», reiteraba ayer el portavoz de la comisión deportiva del Arousa, Eduardo Carregal.