Sergio Ríos es el portero del cuadro vigués, que es el colíder de Tercera y que este domingo se enfrentará al Arousa
27 nov 2015 . Actualizado a las 13:29 h.Una llamada de Javier Maté, en septiembre del año pasado, cambió la vida de Sergio Ríos. Este cambadés, al que el Celta pescó cuando militaba en el Arousa, se estaba recuperando de una lesión de menisco que se produjo al final de la temporada 2013-14, cuando militaba en el Atlético Malagueño. Fuera del circuito de la Tercera gallega, no tenía ya mucha confianza en volver a sonar para los grandes del campeonato. Pero Maté, que lo conocía de su estancia en la cantera céltica, lo llamó para reclutarlo para el Rápido de Bouzas.
Su impacto fue inmediato. De su mano, con sus manos habría que decir, el conjunto olívico fue creciendo en la clasificación hasta completar una campaña sin más apuros. La situación ha mejorado en la presente. El Rápido de Bouzas se ha convertido en uno de los outsiders de la competición. Sergio Ríos tiene las llaves del candado del conjunto vigués que es, con mucha diferencia el menos goleado de la Tercera Gallega.
Nueve goles encajó el guardameta arousano en los catorce partidos que jugó. Una solvencia defensiva que ha permitido al Rápido de Bouzas encaramarse al coliderato de la clasificación, que comparte con el Barbadás. El conjunto olívico ganó el pasado fin de semana al Ribadumia y este domingo se enfrentará al Arousa. Siete victorias, seis empates y una única derrota -la sufrida en el terreno de juego del Bergantiños en el único encuentro del campeonato en el que Sergio encajó más de un gol- forman la trayectoria del próximo adversario del conjunto de Piscis.
El Bouzas cuenta con veintisiete puntos, seis más que el Arousa, pero le espera ahora un tramo de final de primera vuelta complicado porque tras medirse este domingo al Arousa deberá hacerlo también con el Barbadás, el Choco o el Alondras y compaginar estos partidos con la disputa de la Copa RFEF en la que tendrá al Ciudad Rodrigo como adversario.
El Arousa, por su parte, afronta el duelo como una oportunidad para seguir su escalada en la tabla y para poner el punto y final a todos los problemas, y polémicas, que han venido acompañando al equipo durante las últimas semanas.