El Concello indica que los trabajos concluirán a comienzos de la próxima semana
16 dic 2016 . Actualizado a las 05:00 h.Las obras que se están llevando a cabo estos días en O Grove han despertado cierto revuelo entre los comerciantes mecos. El presidente de la asociación de Empresarios Grovenses de Bens e Servidos, Pepe Besada, habla de «un poco de nerviosismo». El problema, coinciden todos, no son las obras en sí, si no, las fechas. Que coincidan con la campaña navideña. «Las obras hay que hacerlas, si queremos tener ciertas cosas son necesarias, pero echamos en falta que no fuese de una manera ordenada», señala Besada. Para él, el principal problema es que coincidieran tantas en una época que no les parece la más idónea. Lo que no gusta, prosigue, es que «el pueblo esté patas arriba».
Esta perspectiva es compartida por buena parte de los comerciantes que tienen sus negocios en las zonas afectadas, como la calle Castelao. Desde Snappers Surf Shop, en la céntrica avenida meca, afirman que «hay que planificar el tiempo y el momento en el que se hacen las obras». Uno de los primeros inconvenientes que encuentran es el ruido. «Pusimos luces y música en la calle para darle más vida y está última apenas se escucha», indican. Sobre si hay posibilidades de que las obras afecten a la actividad, señalan que «para la gente es más incómodo». «A quince de diciembre, consideramos que no procede. Tampoco se nos comunicó que iban a llevarse a cabo», matiza. Desde Deportes Hermida, también en la calle Castelao, afirman que «si el tráfico ya acostumbra a ser complicado, ahora más. Hay un cartel diciendo que, por ejemplo, el día 18, no sé podrá aparcar». Señalan también que hay factores externos que siempre afectan. Al igual que las lluvias pueden perjudicar a las compras, «un calle cortada se nota». La conclusión es que «sería preferible que se hiciesen en temporada baja para el comercio». Desde Kukadas, en Pablo Iglesias, relatan que «el año pasado también hubo varias calles cortadas». Sineiro y un trozo de Xoán XXIII son otras de las vías afectadas.
Para la preocupación porque «las obras se sabe cuando empiezan pero no cuando acaban», tiene respuesta la concejala de obras, Ángeles Domínguez. Afirma que solo se prolongarán hasta la próxima semana las que se están llevando a cabo en la calle da Platería. «Entre lunes y martes estará todo listo», sostiene. La mayor parte de los cortes se deben a la colocación de una línea de Fenosa, una tarea con la que se comenzó hace un año y que se retomó, tras un parón, con el final de la Festa do Marisco. «El día de Año Nuevo de las últimas Navidades hubo un corte de luz y no queremos que vuelva a ocurrir algo similar», recuerda.
Las de Plaza de Arriba, al igual que la calle Raposeira, deben sus obras a la instalación de gas natural. «Dos edificios estaban pendientes. Era una reclamación de los vecinos y ya en verano no pudieron hacerse», señala la concejala. Lamenta la complicación de las obras y afirma que concluirán en los plazos acordados.