«A diferencia está no bolígrafo. Todo depende do que se escriba ou non»

m.?h. pontevedra / la voz

O GROVE

25 may 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

En estos tiempos en los que a los niños se les suele comprar su primera tableta electrónica antes de que sepan leer, para cambiar los viajes con lloros en el coche por entretenidos trayectos con el pequeño viendo los dibujos, los policías locales todavía trabajan con bolígrafo y libreta o talonario. Esas son sus herramientas a la hora de poner una sanción. Esas, y el denominado codificador, un librillo que les resume la ley de Tráfico. ¿Qué hay de la tecnología? Pues poco se sabe de ella. Las PDA, los ordenadores de bolsillo, que en algún momento se pusieron de moda como herramienta para los agentes, están casi desaparecidas, salvo en la ciudad pontevedresa. Desde Caldas, cuentan que usaban esos aparatos, que los facilitaba la Diputación, pero que se fueron estropeando y no hubo recambio. En Poio y O Grove señalan que las máquinas tener las tienen, pero empaquetadas y sin estrenar. Según explican los agentes, pasaron varios informáticos por las instalaciones policiales y no fueron capaces de ponerlas a funcionar. En otros sitios, como Moraña, los municipales hicieron cursos sobre PDA, pero nunca llegaron a tener los aparatos. Así que la libreta y el bolígrafo imperan a lo largo y ancho de Pontevedra y Arousa. Mandan tanto que, tras hacerle varias preguntas sobre qué sanciones son graves y cuáles no, y tras comentar con él las drásticas diferencias entre concellos pese a interpretar casi todos la misma ley -algunos, para las sanciones leves tienen ordenanzas propias-, un agente de Marín habló de forma clara y contundente: «A diferencia está no bolígrafo. Todo depende do que se escriba».

Distintos codificados

¿Tiene razón este hombre, uno va a pagar una cantidad muy diferente dependiendo de los matices que le ponga a la denuncia quien la firma? No todos los agentes locales consultados comparten esa misma visión. Pero sí indican que a veces es difícil interpretar la misma ley. Y que hay muchísimos casos de estacionamientos indebidos diferentes. Además, Manuel Omil, portavoz de los agentes pontevedreses, introducía una cuestión: «El codificado que se utiliza, que es un resumen de la ley, puede estar hecho de distinta forma. Y hay que actualizarlo constantemente, porque hay continuas reformas, y eso a veces no es tan fácil, de ahí que surjan diferencias entre los concellos».

A mayores de todo esto, hay otra cuestión mucho más humana. Como pasa en otras muchas cuestiones de la vida, con las multas, no todos los ojos ven igual. Así que es lógico que entre dos personas que pongan denuncias por cuestiones similares las descripciones que hagan quizás sean diferentes. Y es que la ley en materia de Tráfico, como tantas otras, a veces no es dos más dos. Aún así, ayer, al preguntar en distintas oficinas policiales, más que dar argumentos de viva voz, los agentes se remitían a sus famosos libros codificados para determinar sanciones y cuantías. «Hai que mirar sempre o libro, todo parte de aí», manifestaban desde Cambados.

Luego está también el asunto de la tramitación. Si las multas se hiciesen todas ya mediante aparatos como las PDA, automáticamente quedarían registradas y la leyenda de retirar una sanción sería eso, únicamente una leyenda y punto. ¿Qué ocurre con la libreta o talonario? Los agentes señalan que es lo mismo. Y que, hoy por hoy, todo queda registrado al milímetro.