La oposición tumba, por primera vez, una propuesta del gobierno grovense

Maruxa Alfonso Laya
m. alfonso O GROVE / LA VOZ

O GROVE

La oposición ha cambiado el día del Carmen, un sábado, por el de San Martiño, que es viernes.
La oposición ha cambiado el día del Carmen, un sábado, por el de San Martiño, que es viernes. m. ferreirós< / span>

PP, BNG, EU y PGD lograron imponer sus propios festivos locales a Cacabelos

24 nov 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

Los cuatro partidos que forman la oposición de O Grove hicieron ayer valer la mayoría con la que cuentan en el pleno. Y lo hicieron por primera vez durante este mandato para sacarle al grupo de gobierno la potestad de elegir los días festivos. Tal y como había augurado el concejal del Partido Galeguista Demócrata, Alfredo Bea, la Xunta obligó al alcalde, Jose Cacabelos, a convocar una sesión para ratificar lo que en su día había aprobado la junta local de gobierno. Pero no pudo ser. Fue la propuesta del propio Bea, que cambia el día del Carmen por el de San Martiño, la que contó con más votos.

La oposición llegó al pleno enfadada con el alcalde. Unos por la hora de la misma, las nueve de la mañana, que «atentaba contra os dereitos laborais de moitos concelleiros», se quejó el portavoz del BNG, Heladio Outeiro. Otros, por que este no había tratado de negociar una propuesta de consenso sobre qué días serán festivos el próximo año. Empezó el propio Bea, recordando que ya había advertido de que esto podía pasar, porque la ley establece que es el pleno y no la junta de gobierno la que elige los festivos locales. Propuso que en vez del Carmen, como este cae en sábado, se eligiese el San Martiño. El PP fue el primero en sumarse a esta propuesta y a las críticas de Bea. «É inadmisible que teñamos que convocar un pleno para tratar este asunto», argumentó su responsable. A ellos se unió Esquerda Unida. «Temos que criticar a forma en que o goberno tratou este asunto porque estamos aquí para tratar algo que xa foi a pleno», se quejó su portavoz, Xan Lamelas. El Bloque vio en esto una victoria «de David sobre Goliat, porque Bea lle avisou por activa e por pasiva e vostedes fixeron caso omiso».

De nada sirvieron las explicaciones del regidor. Este aclaró que el pleno tenía que ser por la mañana porque también incluía el sorteo de las mesas electorales y si no, no daba tiempo, y a las nueve porque si no el resto de su equipo no podía ir. También señaló que, hasta ahora, había sido la comisión de gobierno la que había elegido los festivos. «Estamos facendo unha cuestión de Estado dos festivos locais. Aproveiten a maioría e fáganos cambiar», argumentó el alcalde. Y así fue. Tras una hora de debate la oposición respaldó a Bea.