El primer equipo del U.S.D. de O Grove celebró el domingo su regreso a la Preferente 90 minutos después de hacerle el pasillo a los cadetes del club, ascendidos el día 11
21 abr 2015 . Actualizado a las 05:05 h.Ser miembro de la Unión Sociedad Deportiva de O Grove es hoy sinónimo de celebración. Como lo viene siendo desde el pasado día 11, cuando el modesto club arousano empezaba una cadena de alegrías de esas que probablemente solo se sucedan una vez en la vida. Y es que en cuestión de ocho días sus integrantes han vivido el hito histórico del ascenso del conjunto cadete a la División de Honor, la máxima categoría en España, la clasificación del plantel juvenil para la promoción a la Liga Gallega; y el pasado domingo, el regreso del primer plantel de la entidad a la Preferente Autonómica tras su descenso a Primera hace un año.
A eso de las siete de la tarde del pasado día 11 arrancaba la fiesta del Unión. Ese día los pupilos de José Manuel Vecoña certificaban el ascenso a División de Honor Cadete, categoría en la que el Arousa permanecía hasta entonces como único club de la comarca con historial en la misma. Lo hicieron con un 3-0 sobre el Barbadás. Tan solo 19 horas después el conjunto juvenil del Unión, también con Vecoña al frente, sellaba su presencia en la fase de ascenso a la Liga Gallega. En el primer caso, con tres jornadas de campeonato todavía por delante; en el segundo con cuatro.
El pasado domingo el conjunto de Primera Autonómica del club y los jugadores de su rival, el Caselas, hacían el pasillo de honor a los integrantes del cuadro cadete en el Monte da Vila. Una imagen para el recuerdo, mejorada al término del choque con una foto conjunta de séniores y cadetes celebrando el regreso de los hombres de Borja Burgos a la Preferente.
Se da la curiosidad de que para lograr este último éxito el Unión necesitó, además de su 1-0 sobre su rival por el segundo puesto provisional, que el Moaña no ganara en Salvaterra -empató a 1- a falta todavía de tres jornadas para el final de la Liga. Y decimos que se trata de un dato anecdótico por cuanto, recordaba ayer el hoy portavoz de la gestora y presidente entonces del club, José Manuel Otero, Nel, en el anterior regreso del Unión a la Preferente, hace tres campañas con el isleño Ricardo Dios, se había sellado el ascenso en Moaña con cuatro partidos más por jugar. Y hace nueve días los de Borja Burgos dejaron virtualmente en la cuenta al Moaña derrotándo 1-3 a domicilio.
Y ahora, a por el récord y título
Tanto Nel como el entrenador destacaban ayer como la clave fundamental del último éxito grovense el hallarse ante una plantilla que forma «unha piña». Un colectivo diseñado para «estar entre los cinco primeros», en el que se mezcló a la perfección una alta dosis de juventud y grandes aportes de veteranía de alta graduación con los fichajes de Fiti y Diego Blanco. La coincidencia varias semanas de las lesiones de ambos y del también curtido en mil batallas Ameixeiro, pareja en el centro de la zaga de Fiti, lastró los resultados del Unión en la primera vuelta. Con la plantilla prácticamente al completo, el equipo encadena ahora diez victorias.
«En el año de ascenso con Ricardo -como campeón de Liga y Copa Deputación- el Unión llegó a encadenar también 10 victorias. Nuestro nuevo reto», apunta Burgos, «es superar esta cifra, y luchar por el título -el Domaio es líder 3 puntos por encima».