Una presidenta que predica con el ejemplo

Maruxa Alfonso Laya
m. alfonso CAMBADOS / LA VOZ

MEIS

MARTINA MISER

Considera que las mujeres con cargos de dirección animan a otras a dar el paso y a participar activamente

12 feb 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

De las más de doscientas firmas que pertenecen a la Asociación Galega de Cooperativas (Agaca), solo tres o cuatro tienen a una mujer como presidenta. «Supoñemos o 3 % das cooperativas de Galicia», explica María Dolores Calvo Méndez. Lleva tres años al frente de Condes de Albarei. «É un reto persoal, implica traballo e responsabilidade, pero tamén é moi enriquecedor», asegura. Porque ella es una firme defensora de este tipo de asociacionismo y tiene una máxima, aprendida de su padre, que casa a la perfección con el espíritu de estas empresas: «A nivel persoal é moi satisfactorio poder aportar algo ao grupo e á sociedade».

No es esta la primera vez que Dolores se pone al frente de una entidad. En su parroquia natal, San Lourenzo de Nogueira (Meis), dirigió durante años la comunidad de montes y fue entonces cuando se dio cuenta de que «cando hai mulleres na presidencia ou nos órganos de dirección, outras mulleres se animan máis a participar». A ella le pasó. En las primeras reuniones era la única representante del colectivo femenino. «Cando o deixei, ás reunións viñan máis mulleres que homes», relata.

Hace ahora 25 años que llegó a Condes de Albarei, pero fue en el 2006 cuando se incorporó al consejo rector de la cooperativa, «animada por outros socios». Estuvo ocho años de vocal y cuando el anterior presidente decidió dejar el cargo, ella dio el paso. «Por responsabilidade. Asumín que tiña que ser alguén do consello porque hai que coñecer como funciona isto», cuenta. Su objetivo: «Intentar seguir botando unha man e, do que se foi aprendendo, revertilo na sociedade», asegura. Reconoce que puede dar un poco de vértigo eso de ponerse al frente, «pero hai que pensar que non hai que ter medo. Tes que ter disponibilidade, ganas e ilusión», afirma. Y también sabe que su caso es, por ahora, una excepción en la comunidad. «É certo que é difícil que as mulleres cheguen ao consello reitor e asuman a presidencia. Pero os tempos teñen que ir cambiando», sostiene. En Condes de Albarei llevan tres años realizando cursos destinados al «emporaderamento da muller, para animar ás socias a que participen, a que se formen para que non teñan limitacións e medos de que non o poden facer». Parece que han tenido éxito. En algunos momentos, el consejo estuvo formado por el mismo número de hombres y mujeres. Hoy, las chicas son minoría, tres a cinco, pero a cambio tienen una presidenta.

Dolores tiene muy clara cuál es la labor de una cooperativa, «mellorar a economía dos socios, pero tendo claro que aquí prima o ben común sobre o particular», sostiene. La cosa todavía se complica más, porque estas empresas «teñen que ser dinamizadoras da zona, pero son empresas e como tal teñen que competir no mercado e ser eficientes», sostiene. Considera que este tipo de compañías acaban generando riqueza en todo su entorno, «e iso é algo que debería poñer en valor o consumidor». También tienen beneficios para sus socios, «crean autoestima nas persoas, dignifican, porque cando Condes de Albarei recibe un premio eu sinto que teño algo de partícipe nese éxito», añade. Y para lograr esa implicación, resulta fundamental la labor de los consejos rectores. «Temos que integrar aos socios, facelos partícipes e que sintan que forman parte», afirma.

Sus tres años en el cargo han sido «enriquecedores porque aprendo de todos. Hai moita xente que che axuda». Y eso que el sector no se encontraba en su mejor momento. «Vivimos unha dobre crise, por un lado a crise económica e, por outro, a colleita de 2011, que foi moi abundante», explica. Cuenta que las bodegas se encontraron con que, cuando más producción tenían, «os mercados non era receptivos». Condes de Albarei, además, estaba entonces inmerso en la compra de Pazo Baión «unha inversión tremenda e de envergadura». «Pero estamos aquí, os socios poden presumir porque estamos saíndo, porque superamos os peores momentos xuntos e con moito esforzo dos socios e da sociedade», sostiene. Ella es positiva. «O aire que se respira agora é outro, e moi esperanzador». Así que ahora la cooperativa ya está en otro momento. «As cousas van ben enfocadas e toca empezar a desfrutar». Por ejemplo, con el premio logrado al mejor rincón enoturístico de España conseguido por Pazo Baión.