La Diputación, dueña de palacios, un castillo y de... cuatro pisos

Lars Christian Casares Berg
ch. casares PONTEVEDRA / LA VOZ

MEIS

El patrimonio de la institución está valorado en 237 millones, incluidas las viviendas en Madrid y Pontevedra

10 abr 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Valorado en más de ochenta millones de euros hace tres años, en la última revisión, el patrimonio inmobiliario de la Diputación de Pontevedra, no ha hecho más que crecer desde entonces. A esa tasación del 2013, hay que sumarle las Pousadas -los establecimientos hoteleros que construyó la institución para ceder su explotación a una cadena hotelera-. En aquella tasación se incluía el sanatorio de A Lanzada, ahora reconvertido en Pousada, pero no su remodelación y readaptación como espacio hotelero.

La Diputación de Pontevedra tiene, según el último inventario de bienes inmuebles de la institución, a día de hoy, 196, entre edificios y fincas urbanas. Computan ahí, por supuesto, las sedes de la institución, empezando por el Pazo de Montero Ríos, pero también la ciudad infantil Príncipe Felipe, el Palacete de las Mendoza, sede de Turismo Rías Baixas, y el castillo de Soutomaior, también propiedad pública a través de la institución provincial. Todas las parcelas sin vender del polígono industrial de Barro-Meis también están en el cómputo. O el pazo de Montero Ríos en Lourizán, la Escola de Cantería o los seis edificios que conforman el Museo de Pontevedra, además del archivo provincial.

Ante tal patrimonio, la tasación puede parecer baja, especialmente por el difícil cálculo que se le debe aplicar a un bien de carácter histórico, como el castillo de Soutomaior. Con todo, hay algunas propiedades más mundanas, como casetas para guardar aperos, hórreos o garajes.

O algunas sorpresas que depara el inventario, como dos viviendas en la calle Amado Carballo de Pontevedra con las que cuenta la Diputación u otros dos pisos en la avenida de Badajoz, en la capital de España. Todo indica que el origen de estos inmuebles podría estar en la cesión de alguna herencia a favor de la institución provincial, algo que ha ocurrido en diversas ocasiones a lo largo de los últimos años.

Obras de arte

Aun teniendo un ingente patrimonio inmobiliario, lo que reporta un mayor importe de tasación a los bienes de la institución son las obras de arte del Museo, valoradas en 156 millones de euros, casi el doble del precio que se le adjudica al patrimonio inmobiliario y a las fincas rústicas, en su conjunto. Estas últimas son solo 36, frente a las 196 urbanas.

Pero, ¿cómo se calcula cuánto vale todo el lote? En el caso de los inmuebles, los datos se refieren a los valores catastrales y figuran en la aprobación del inventario de la institución. La Diputación dispone de más de 1,5 millones de metros cuadrados de suelo, principalmente concentrados en las fincas de Lourizán, Salcedo, Príncipe Felipe y Soutomaior, además de Mouriscade, en la comarca del Deza.

El polígono industrial de Barro-Meis dispone de una superficie de 250.000 metros cuadrados, aunque buena parte ya ha sido vendida a empresas para la instalación allí de sus naves industriales.

Pazo de Montero Ríos. Es la sede institucional, donde se celebran los plenos provinciales y donde está la sede de la presidencia. Hay otra sede de la institución en Vigo.

Soutomaior. Es quizá el bien histórico, entre los inmuebles, más preciado. Sin embargo, su tasación es baja, al igual que la de todos los inmuebles, ya que se toma como referencia la catastral.

Príncipe Felipe. Es uno de los complejos que mayor dotación presupuestaria consume anualmente, hasta los diez millones de euros. También uno de los que tiene una tasación más elevada.

Lourizán. El Pazo de Lourizán, antigua residencia de Montero Ríos, también propiedad de la Diputación de Pontevedra, está incluido como una de las 196 propiedades de la institución.

Mendoza. El Palacete de las Mendoza, en la avenida de Santa María de Pontevedra, fue comprado por la institución a una entidad financiera para convertirlo en sede de Turismo Rías Baixas.

Hoteles. Las Pousadas se han incluido recientemente en el patrimonio de la institución. Son establecimientos hoteleros construidos con fondos europeos y explotados por una empresa.