Setenta talentos en busca de premio

María Hermida
maría hermida VILAGARCÍA / LA VOZ

CAMBADOS

capotillo / martina miser / leiro

Alumnos de una veintena de institutos de Pontevedra y Arousa optan a los galardones de bachillerato gallegos

15 jun 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

En segundo de bachiller, el último curso antes de la Universidad, hay un tema que se lleva la palma en las conversaciones a lo largo del curso: la selectividad. Ahora, con los exámenes de acceso ya hechos -aunque queda que salgan las notas-, al fin se puede hablar y pensar en otra cosa. Por sorprendente que parezca, hay quien ya tiene la mente puesta en otro examen. No en vano, algo más de setenta alumnos de las comarcas de Pontevedra y Arousa se presentarán a las pruebas indispensables para optar a los premios extraordinarios de bachillerato. ¿De qué galardón se trata? De uno en el que se dan cita los grandes talentos gallegos de la promoción -hay más de 700 candidatos-. No en vano, uno de los requisitos imprescindibles para presentarse es tener un mínimo de 8,75 de media en el bachillerato. ¿Qué se gana? Mucho. Satisfacción personal, según indican algunos de los alumnos que concurrirán. Y, además, un pellizco en metálico: se dará un máximo de veinte premios de mil euros cada uno y la matrícula del año siguiente gratis.

Pese a tratarse de expedientes brillantes, cuesta convencer a muchos estudiantes para que se presenten al premio. Cuentan en los institutos que el problema es el hartazgo de hacer exámenes. «Nosotros les insistimos, claro que sí, pero a veces no quieren», indica la directora del Valle-Inclán de Pontevedra. Además, en los centros subrayan otra cuestión: «Al premio hay que anotarse justo antes de hacer selectividad, cuando ellos están muy nerviosos. Y los exámenes son en septiembre... Deberían ser ya, ahora que tienen fresco todo después del selectivo. Da pena ver que luego muchos no se presentan porque ya empezaron las clases en la Universidad o simplemente ya que no se enteran de la fecha de la prueba, porque sale en los boletines oficiales y eso lo solemos mirar solamente los profesionales», indica Julián Iglesias, coordinador de bachillerato del SEK-Atlántico.

No se conocen, pero las palabras de Julián las entenderían a la perfección Sara, Lara y Graciela. Las tres son alumnas del instituto de Vilalonga. Dos viven en Sanxenxo y una en Meaño. Y todas tienen previsto acudir a los exámenes de los premios extraordinarios de bachillerato.

Pocos caprichos

Dicen con una misma voz que les da pereza que sea en septiembre, cuando ya tendrán un pie en la Universidad. Aún así, con expedientes de bachiller muy próximos al diez, quieren hacer la prueba para demostrarse cosas a sí mismas. Lo cuentan tal cual. «Quiero ver qué puedo hacer, supongo que me presento por eso», dice Lara. Las tres, sin excepción, de ganar uno de esos premios lo destinarían a libros y a gastos universitarios. ¿Ni un solo capricho? Pues pocos.

«Eu quero facer Química e irei para Santiago, creo que iso xa implicará moitos gastos así que empregaríaos niso

», señala Graciela. «Si los ganase pagaría los libros del año que viene», añade Lara, que quiere estudiar Farmacia. «

Home, quizais podería comprar algo que me gustase»

, opina Sara, que pretende hacer Derecho y luego especializarse en Derecho Internacional.

Ellas no son las únicas que optan al premio. En el instituto Valle-Inclán de Pontevedra son varios los que prevén acudir a la prueba. Lo hacen casi todos los jóvenes que obtuvieron matrícula de honor. Entre ellos, Nuria. Uno no puede dejar de emocionarse al escuchar qué le gustaría hacer si ganase los mil euros: «Me compraría un piano», indica. La cosa tiene miga. Porque Nuria es una virtuosa de la música, encamina por ahí su carrera académica y sueña con llegar alto en este ámbito. Le gustaría componer bandas sonoras de películas. Le tocará, como al resto, ir al examen en septiembre. En la prueba, tendrá que demostrar sus conocimientos de varias asignaturas, una elegida por ella misma, una lengua extranjera y un comentario de texto.

Tamara, de Cambados, del instituto Francisco Asorey, tiene claro que, aunque no gane, demostrar sus competencias en todos esos apartados le servirá de algo: «Creo que é unha oportunidade de demostrarme a min mesma o que podo conseguir». Ella eligió hacer examen de química, además de las otras materias comunes. No tiene claro qué carrera va a estudiar. Pero sí cuenta con desparpajo qué destino le gustaría dar a esos mil euros si lograse llevarse un premio de bachillerato: «A min gustaríame viaxar cos amigos, coa familia... Como sexa. Teño moitísimas ganas de facer unha viaxe, por exemplo, Interrail». Siendo el examen en septiembre, nadie prevé por ahora preparar nada. Pero, por si se animan, vaya por delante el consejo de Julián Iglesias: «El año pasado un alumno decidió prepararlo bien, estudió Latín... Y por supuesto fue premio de bachillerato», cuenta desde el centro SEK-Atlántico.

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