La Festa do Albariño ¿llevará capa?

Bea Costa
bea Costa CAMBADOS / LA VOZ

CAMBADOS

nacho Feijoo

Concello de Cambados y Capítulo Serenísimo se sentarán el lunes para hablar del programa de actos. El gobierno quiere cambiar el modelo que funcionó hasta ahora

15 jun 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

El año pasado apenas tuvo margen de maniobra. Al cuatripartito de Cambados, PSOE-BNG-Somos-Pode, se estrenó en el gobierno local con la principal asignatura del verano pendiente: organizar la Festa do Albariño. De modo que no pudieron cambiar todo lo que hubieran querido en la organización. El papel del Capítulo Serenísimo do Albariño fue una de esas cosas. La izquierda cambadesa llevaba años denunciando la politización que se hacía de la fiesta por parte del PP a través del Capítulo, pero en el 2015, aunque con otras caras, se mantuvo el modelo anterior.

No faltó la polémica. El gobierno local condicionó el apoyo económico del Concello a que no hubiera políticos entre los nuevos nombramientos y a que la investidura se hiciera en la plaza de Fefiñáns para que todo el mundo pudiera asistir, pero el Capítulo se negó alegando razones de seguridad y volvió a celebrarlo en el patio de armas del palacio, con invitación y aforo limitado.

Sin dinero público

El Concello retiró la financiación municipal pero no faltó el acto de investidura ni el desfile del domingo por la mañana por las calles del pueblo. Y la alcaldesa, Fátima Abal, se estrenó como flamante dama do Albariño. Aquella estampa dejó un regusto amargo en el seno del cuatripartito, que se prometió que en la edición del 2016 las cosas iban a cambiar. Todavía no se ha concretado cómo -a la espera de que gobierno local y Capítulo se reúnan este lunes- pero se da por hecho de que habrá cambios.

Entretanto, la alcaldesa prefiere guardar silencio mientras que BNG y Somos ya anunciaron su deseo de desligar los actos oficiales con los que realiza el Capítulo Serenísimo do Albariño. Por su parte, José Ramón Abal (Pode) considera que la colaboración entre ambas partes es posible, siempre y cuando el Capítulo se avenga a que el acto de investidura sea en un lugar abierto para que pueda acudir todo el que lo desee.

Por su parte, desde el Capítulo Serenísimo prefieren esperar a conocer la propuesta que le plantea el equipo de gobierno antes de pronunciarse respecto a sus planes para el 7 de agosto, el día reservado para que las capas salgan del armario.