El precio de la vivienda bajó un 40 % en la comarca en tan solo ocho años

Susana Luaña Louzao
susana luaña VILAGARCÍA / LA VOZ

CAMBADOS

Pese a las facilidades de los promotores para alquilar o vender viviendas, el mercado no acaba de despegar en la comarca.
Pese a las facilidades de los promotores para alquilar o vender viviendas, el mercado no acaba de despegar en la comarca. mónica irago< / span>

Cambados es de las poblaciones españolas donde el descenso fue mayor en el 2015

08 ene 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Aunque es cierto que el mercado inmobiliario empieza a dar algunos síntomas de recuperación, en la comarca todavía hay tal cantidad de viviendas vacías para una muy escasa demanda, que los precios de los pisos siguen desplomándose, contra la tendencia general que ya está al alza. Así lo confirma el informe anual del portal inmobiliario pisos.com, que si bien constata que en los últimos meses, en términos generales se constata un pequeño incremento del precio de la vivienda, Galicia todavía sigue a la baja, con una disminución del 9,7 % en el último año, aunque ese descenso se ralentizó en los últimos meses del 2015. Pero en Arousa, la recuperación, de llegar, lo hará a lo largo del 2016, porque de momento, los precios siguen desplomándose.

El portal, que analiza los municipios de toda España, llama la atención sobre lo que ocurre en Cambados, que es la segunda localidad española en la que más bajó el precio de la vivienda, con un 20 % menos respecto al 2014, superada solo por el municipio asturiano de Aller.

Las inmobiliarias que operan en la localidad reconocen que es así. En Dozo Xestión, por ejemplo, admiten que los de construcción nueva se desplomaron en los últimos meses. «Se hizo mucha obra nueva y los promotores tuvieron que bajar los precios porque no los dan vendido», asegura Natalia Rey. Sin embargo, al menos en Cambados, el de la vivienda usada se mantiene. «Los particulares quieren recuperar lo invertido y no quieren vender el piso por menos de lo que lo compraron».

No ocurre lo mismo en Vilagarcía. Mariely Méndez, que lleva 25 años al frente de la inmobiliaria Maybe, asegura que en la capital arousana, lo poco que se vende, se malvende. «Es gente que tuvo que vender a la desesperada y que ya no pone un precio por el metro cuadrado, coges lo que te dan». Frente a lo que ocurre en la capital del albariño, en Vilagarcía si se nota una muy tímida recuperación. Al menos en los meses de verano. «Alguna gente compró para vivir y otros para invertir, algo que antes era impensable porque no se atrevían». Pero el desplome en los últimos años ha sido tal, que desde que empezó la crisis, los precios bajaron hasta un 40 %.

Al margen de lo que ocurre en la comarca, en pisos.com aseguran que el mercado inmobiliario está volviendo a la normalidad tras muchos años desplomándose por razones que su director general, Miguel Ángel Alemany, relaciona con la burbuja inmobiliaria, más que con la recesión económica. «Es importante dejar atrás los récords logrados en los años previos a la crisis -advierte-, porque se dieron en un entorno artificial caracterizado por la sobrevaloración inmobiliaria y un crédito extremadamente accesible».

1.480 ?

En Galicia

Precio medio del metro cuadrado en la comunidad.

1.000 ?

En Arousa

Para un piso de tres habitaciones y 90 metros cuadrados.

2.262 ?

En Sanxenxo

Sigue siendo la localidad más cara de toda Galicia.

El alquiler en Vilagarcía cayó un 25 % y cada vez hay más gente que comparte piso

A diferencia de lo que ocurre en Cambados, en Vilagarcía también se desplomó el precio de la vivienda de segunda mano, más que nada porque quien la vende lo hace por necesidad y acepta el precio que se le ofrece. Y en la capital arousana, también bajó considerablemente el precio de los alquileres. Los que antes costaban 450 euros bajaron a los 350, y los más pequeños, que hace unos años rondaban ese precio, están ahora sobre los 280 euros.

Y eso que cada vez es más la gente que se anima a alquilar. Ante la imposibilidad de adquirir una vivienda, porque ni los sueldos lo permiten ni los bancos sufragan las hipotecas, las parejas jóvenes que empiezan una vida en común optan por el alquiler, y tal y como indica Mariely Méndez, también es habitual que los jóvenes que se quieren independizar y carecen de un nivel adquisitivo que les permita vivir solos, opten por compartir piso entre varios.

Todo ello ha dado lugar a que el mercado inmobiliario haya dejado de ser negocio y que solo sobrevivan las agencias con más solvencia y con muchos años de experiencia.