Alumnos de huelga, profesores en clase

marina santaló VILAGARCÍA / LA VOZ

A ILLA DE AROUSA

MARTINA MISER

La protesta contra la Lomce se vivió en las aulas de Arousa de una forma dispar, siendo secundada por el 65 % de los estudiantes y el 23 % de los docentes

10 mar 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Las aulas de la comarca de Arousa se vaciaron ayer con motivo de la protesta convocada contra la Lomce y en la que se hizo un llamamiento a todos los niveles educativos. El apoyo fue muy diferente entre el alumnado y el profesorado. Mientras que los estudiantes secundaron el parón en un 65 %, sus maestros lo hicieron solo en un 23 %. Esto significa que de los cuarenta centros escolares públicos de la comarca (no se logró contactar con otros cinco) faltaron 7.301 alumnos de 11.293, y 274 profesores de 1.189. Si ponemos el foco en cada centro en concreto, los porcentajes varían significativamente entre unos y otros. Puede decirse, sin embargo, que la participación en la huelga fue mayor en los institutos que en los colegios.

Así mismo, desde varios de los primeros resaltan notables diferencias entre los alumnos de primero y segundo de la ESO y el resto de los cursos. Es el caso, por ejemplo, del IES Francisco Asorey, de Cambados. Solo faltaron entre el dos y el tres por ciento de los más pequeños. En total: 330 de los 590 alumnos. Desde el centro señalan que también influyó en los números el hecho de que coincidiese con el final del segundo trimestre de los ciclos medios y superiores, que se juegan el acceso a la parte práctica.

Mayor y menor seguimiento

Tanto el CEIP Torre Illa como el IES da Illa de Arousa fueron dos de los centros en los que la presencia en las aulas fue menor. Mientras que en el primero faltaron de 13 profesores de 28 y 335 alumnos de 353, en el segundo lo hicieron 14 de 24 profesores y todos los alumnos. Ninguno de los 149 estudiantes que tiene el centro acudió ayer a clase. En As Bizocas, de O Grove, la situación fue parecida: de los diez profesores solo acudió el director, y de los 82 alumnos solo asistieron 63. También en el San Bartolomé, donde faltaron 9 profesores de 13 y 80 alumnos de 90; y el Cabanillas, donde secundaron la huelga 31 maestros de 45 y 380 de 400 estudiantes. A ellos se sumó un empleado no docente del centro. En otros como el Cotarelo, el de Carril, el de Vilaxoán y el de Valga la ausencia de los alumnos también muy significativa: alrededor del 90 %.

En el otro extremo se encuentran el San Tomé, As Covas y el de Armenteira, donde el seguimiento fue muy escaso. También en el colegio Xesús Ferro Couselo y la C.R.A de Valga. En ninguno de ellos hubo ausencias por la huelga contra la Lomce.

El IES de A Illa fue el único centro en el que el seguimiento del paro fue total

Medio millar de manifestantes se congregaron en la plaza de Galicia

«Non queremos para nada unha Lomce maquillada», «o ensino galego a Rajoy lle importa un bledo» y «non a leis indecentes sen contar cos docentes» son algunos de los cánticos que se escucharon ayer en la plaza de Galicia de Vilagarcía, a donde acudió un buen número de personas convocada por la Plataforma Galega en Defensa do Ensino Público. Fue la concentración más numerosa de las últimas celebradas contra la Lomce: profesores de Vilagarcía, Cambados y A Illa hicieron acto de presencia en una protesta a la que tampoco faltaron los más pequeños. Acompañados de sus padres, sujetaban pancartas con un mensaje claro: «Ensino público de calidade».

Tras la sucesión de cánticos, tomaron la palabra una estudiante, Eider Carballeira, y un miembro de Executiva Federal da CIG-Ensino, Duarte Correa. «Mentres continúe o desmantelamento da educación público seguiremos saíndo a rúa. Precisamos unha lei galega a favor da igualdade de oportunidades e que non impoña unha reválida inxusta e un 3+2 que non fará outra cosa que encarecer os estudos universitarios», alzó ayer la joven estudiante entre la multitud.

Por su parte, Duarte Correa habló de un «paso máis na demostración do rexeitamento do conxunto da comunidade educativa». Invitó a seguir alzando la voz porque «se fomos capaz de paralizala, conseguiremos derrogala». También aprovechó para verbalizar tres exigencias: la reducción del número de alumnos por aula, el incremento de la partida presupuestaria destinada a la enseñanza pública y la creación de una ley gallega de educación que «se adapte as características propias da comunidade».