Acumula siete condenas en menos de tres años por conducir sin tener carné

Alfredo López Penide
López Penide PONTEVEDRA / LA VOZ

AROUSA

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A estas penas se suman otras por distintos delitos circulatorios en el mismo período

16 jul 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

La detención este viernes de madrugada de un kamikaze en el entorno del peaje de la AP-9 en Caldas ha vuelto a poner de manifiesto la problemática de los delitos asociados al volante. De hecho, raro es el día que en el juzgado de guardia de Pontevedra no llegan dos o más casos de conductores interceptados tras una conducción temeraria o después de dar positivo en un control, de igual modo que son habituales los casos de personas que, o bien ya tienen el saldo de puntos del permiso a cero, o bien, simplemente, no se han sacado nunca el carné.

Entre estos últimos se encuentra Salvador R. C., quien, en apenas tres años, los comprendidos entre el 2014 y el 2016, acumuló hasta siete condenas por conducir sin carné. A esta cifra de sentencias, que se complementa con otras resoluciones judiciales por otros delitos vinculados con el tráfico, según confirmaron desde la Fiscalía de Pontevedra, se puede sumar una nueva pena después de que el pasado miércoles, 12 de julio, hubiese sido interceptado por agentes de la Guardia Civil de Tráfico.

Así, este viernes estaba previsto que se celebrase un juicio rápido en el edificio judicial de A Parda en el que el fiscal solicitaba inicialmente nueve meses de prisión. En caso de aceptar esta pena, la misma se reduciría automáticamente a los seis meses de cárcel debido a las propias características procedimentales de estos procesos judiciales, en los que «la conformidad del acusado (...) con la acusación del ministerio fiscal lleva aparejada la reducción de la pena en un tercio a la solicitada», señala el abogado Francisco Sevilla.

En cuanto a los hechos que el fiscal considera acreditado estos se produjeron en la madrugada del 12 de julio en la PO-308 a su paso por el municipio de Poio. En circunstancias que no han trascendido, un dotación de la Guardia Civil de Pontevedra dio el alto al vehículo conducido por Salvador R. C., que «no consta que sea de su propiedad», y verificaron que carecía «de autorización administrativa para conducir por no haberla obtenido nunca».