«Vamos a León con ganas de comernos el mundo, y de disfrutar»

Pablo Penedo Vázquez
pablo penedo VILAGARCÍA / LA VOZ

AROUSA

MONICA IRAGO

Las cuatro jugadoras del Cortegada con experiencia en una fase de ascenso a la LF dan sus razones para creer en el próximo regreso del equipo vilagarciano a la máxima categoría

19 abr 2017 . Actualizado a las 22:01 h.

Confianza. En su justa medida. La exacta para no creerse mejor que nadie, pero también para verse capaz de ganar a cualquiera que se le ponga por delante, y cerrar la semana con uno de los dos billetes con destino a la Liga Femenina que se rifarán desde mañana en el Palacio Municipal de los Deportes de León. Porque si la experiencia es un grado, habrá que coincidir con Sara Gómez, Salomé García, Amy Syll y Belén Mejías que el Kemegal Cortegada es tan favorito como cualquiera de los otros siete equipos presentes en la que se presenta como una de las fases de ascenso más abiertas que se recuerdan en la LF2.

«Vamos a León con confianza, con ganas de comernos el mundo; y sobre todo, de disfrutar», comentaba ayer una Salomé que comparte con las otras tres jugadoras del cuarteto apuntado el mínimo común denominador de encontrarse a las puertas de la segunda fase de sus carreras deportivas. La alero alicantina y Amy son las dos supervivientes de aquel Cortegada que en el 2012 intentaba en Huelva devolver por última vez al club vilagarciano a la élite, sin éxito. Algo que sí había logrado en el 2006 en Rivas Sara Gómez, que con tan solo 19 años ya lucía galones de titular en el equipo arousano tras haber disputado dos mundiales y otros tantos europeos con las selecciones españolas de categorías base, con una plata continental en su palmarés. Mejías, por su parte, se coló con el sorprendente ADBA en la concentración a ocho del 2014.

«Físicamente creo que llegamos en un buen momento», apunta Salomé, que en el 2012, con 19 años, compartía el juego exterior con Montse Gilabert e Ylenia Manzanares. «Yo sigo las fases de ascenso, y creo que esta es de las más competidas. Los cuatro de ambos grupos hemos ganado a todos nuestros rivales en la Liga, o estado a punto de hacerlo. No puedo hablar de uno ni dos favoritos». De ahí que el Cortegada lo sea tanto como sus otros siete rivales de salida en León.

Sin presión y en buen momento

Los años y la experiencia se han sumado a la calidad de Sara Gómez para hacer de la escolta vilagarciana la gran capitana y lideresa de este Kemegal Cortegada. «¿Que si nos veo ascendiendo? ¡Hombre claro, por supuesto, si no no iba a León!», decía ayer en la víspera de la salida del equipo hacia su nueva ciudad de los sueños.

Todo es muy distinto a aquel Extrugasa de hace once años. «Acabábamos de descender de la LF y había presión por volver. Se había hecho un equipo con el objetivo del ascenso», recuerda Sara, alcanzado con nombres como los de Arancha Gómez, Regina Gómez o Taru Tuukanen. «A esta fase», añade, «vamos con menos presión». Y eso, bien gestionado, debe servir de plus a las de Rubén Domínguez. Sobre todo cuando hablamos de un equipo que ha ido «mejorando a medida que avanzaba la temporada, corrigiendo errores. Llegamos en un buen momento».

En esta línea, Belén señala incluso que las dos derrotas con las que cerró la Liga el Cortegada «nos han venido bien, para corregir cosas. Tenemos mucha ilusión. Nos veo bien, por lo menos para meternos en una final, y disfrutarla».

«Nos veo ascendiendo», comenta Amy. « No veo ningún equipo que digas ‘¡Ay, son mejores que nosotras!’», al contrario que en la fase de Huelva en el 2012, en la que sobresalían, repasa, el Bembibre, Cáceres y Huelva. Como sus compañeras, la pívot ha crecido desde aquella primera experiencia, que afrontó con 18 años en una plantilla con tres cincos y Aitana Cuevas titular. Desde la mayor responsabilidad que da saberse ahora referente, Amy sostiene que «podemos subir. Físicamente estamos a tope. Y lo más importante, centradas en la fase».

 

Mantenerse fieles al guion ya escrito y enfocar cada partido como una final, ese es el camino

Con 30 años en su dni y una dilatada carrera con participación en la Eurocup, solo Sara Gómez se adecúa a los cánones de una jugadora con la etiqueta de veterana. Los minutos de juego en la LF2 acumulados por Salomé (24 años), Belén (24) y Amy (23), y su participación ya en una fase de ascenso les permiten sin embargo ahondar también en las claves de un hipotético ascenso. La coincidencia de sus radiografías invita a pensar en que la primera parte del trabajo, el de composición de lugar, ha sido bien cimentado en la expedición del Cortegada a León.

«Sobre todo, lo más importante es que no te puedan los nervios. Después, no querer hacer nada diferente. Debemos seguir haciendo lo que hemos hecho hasta ahora», expone la escolta vilagarciana y asienten sus compañeras.

«El primer partido es importante. Si lo ganas consigues un plus», añade Sara Gómez, para hacer hincapié en todo caso en que «hay que ir partido a partido». Apunte que Salomé amplía sosteniendo que «tenemos que jugar cada partido como si fuese el último, no dejarnos nada para el siguiente. En el plano psicológico tenemos que entender que durante los partidos puede haber rachas, y saber que debemos gestionarlo. Y sobre todo, disfrutar; así es como mejor salen las cosas».

Equipo, ilusión, concentración

Amy resalta que «cada una de las jugadoras hemos aportado al equipo durante la temporada», ya fuera desde dentro de la pista ya fuera desde el banquillo cuando tocaba animar. Lograr mantener esta dinámica es otro elemento que debe trasladar el Cortegada desde la Liga a la fase de León.

El Cortegada viaja cargado de «mucha ilusión», cuenta Belén. Con ella, lo que queda en una pelea tan ajustada donde «puede pasar cualquier cosa» es, dice, «una cuestión de concentración».

La plantilla viaja hoy en una furgoneta y un turismo en la víspera de su debut

En dos tandas sale hoy la expedición del Kemegal Cortegada hacia su hotel de concentración en León. Menos de 24 horas antes de su debut, mañana jueves a partir de las 12.30 horas, en la gran cita del Palacio Municipal de los Deportes de la ciudad castellana frente a su compañero del Grupo A en la liguilla de clasificación para las semifinales por las plazas de ascenso, el Snatt’s Feminí Sant Adriá.

A las cuatro de la tarde parte una furgoneta con el grueso del conjunto vilagarciano. Un turismo lo hará poco después para recoger a las cinco de la tarde a Diana Piñeiro, la segunda entrenadora del Kemegal Cortegada, en A Estrada a la salida de su trabajo. Y es que, ya se sabe, de esto del baloncesto profesional son pocos los que viven en España; al menos sin otra ocupación de la que poder sustentarse.

Desde la directiva su portavoz, José Gorgoso, hacía ayer extensible la ilusión de la plantilla a los responsables del club. «Penso que podemos competir con calquera», comenta. A partir de ahí, concluye, «a ver que pasa».