El dos por uno que tiene encantado al presidente arlequinado

Pablo Penedo Vázquez
Pablo Penedo VILAGARCÍA / LA VOZ

AROUSA

07 feb 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Me decía ayer -por el domingo- el presidente que a lo mejor era cuestión de echar a Jorge -Otero- y dejarme a mí en su lugar, que sería más barato». Manu Álvarez Molares (Vigo, 7 de junio de 1991) recordaba ayer el chascarrillo dentro de la anécdota que supuso ver al preparador físico del Arousa al frente del banquillo en partido de Liga. Con un comentario jocoso de Manolo Abalo al término del claro triunfo (3-1) y aplastante sometimiento del equipo arlequinado a un Fabril que llegaba a A Lomba convertido en una suerte de Mini Superdépor tras sumar 25 de los últimos 30 puntos en juego. Convirtiéndose en el primer rival capaz de marcarle más de dos goles al filial, que solo había encajado un total de 23 en las 23 jornadas precedentes, y concediéndole solo uno a quien llevaba 54.

La broma del mandatario no nacía de un único resultado. Y es que Manu Álvarez empieza a labrarse un currículo en la materia. La temporada pasada ya le tocó suplir a Jorge Otero, entonces en el banquillo del Rápido de Bouzas. «Fue contra el Ordes», rememora, «Jorge estaba expulsado y el segundo fuera de viaje. Era en el último tercio de Liga. El Ordes iba en la mitad de la tabla, y nosotros peleando por estar arriba, a 5-6 puntos de los puestos de promoción. Ganamos 1-4».

Así pues, pleno de victorias para Manu. «Si contamos también el 1-2 al Choco en la primera jornada, tres de tres», añade, en referencia a la primera jornada de esta temporada. Solo que entonces Duvi, el segundo de Jorge Otero, sí se pudo sentar en el banquillo al contrario que frente al Dépor B.

Para el preparador físico vigués lo del domingo «fue una anécdota». Con una primera parte, las sesiones de entrenamiento, en la que como el año anterior en el Bouzas «hubo jugadores que me decían en broma toda la semana a ver si me pones». La segunda tocó en el propio partido. Y ahí «no me cambió nada más que poner la cara los 90 minutos», explica.

En este sentido, Manu Álvarez comenta que «el nuestro es un trabajo muy integral. Jorge es el primer entrenador, Duvi el segundo, y yo el preparador físico. Lógicamente al final es Jorge el que toma las decisiones. Pero como por el trabajo de la semana teníamos claro cómo afrontar, cómo posicionarse frente al Dépor B, solo tuve que corregir cuatro cosas en la primera parte, a balón parado».

En la segunda «Jorge y yo hablamos más, por los cambios. Pero en todo momento de una manera natural, vía móvil», dice Manu; salvo en un momento puntual en el que Duvi bajó de la cabina de prensa en la que siguió el partido con Otero. Claro que todo resultó fácil al ser «bastante superiores al Deportivo B», valora. El plan inicial salió pedir de boca.