Por cuarto partido en el campeonato, los de Otero marcaron en el alargue
06 dic 2016 . Actualizado a las 05:00 h.La frase se la soltó el mítico Juanito a un jugador del Inter hace tres décadas: «Noventa minuti en el Bernabeu son molto longos». Lo hacía el siete madridista después de que su equipo cayera por 2-0 en San Siro en la ida de una eliminatoria europea. Aquel Madrid pasó a la historia por remontadas míticas, como las que consiguió ante el Anderlecht o el Borussia Moenchengladbach y, por supuesto, ante los italianos, a los que acabaría eliminando (3-0) en la vuelta celebrada en la capital de España. Y parafraseando a Juan Gómez podemos afirmar que, como en el Bernabeu, noventa minuti en A Lomba son molto longos. El tanto que Cabanyes marcó ante el Vilalbés le dio un punto al conjunto arlequinado en los minutos de prolongación del encuentro. Una circunstancia que se ha producido ya en cuatro ocasiones en el presente campeonato liguero.
El romance entre el Arousa y el descuento apareció por primera vez en el encuentro con el Alondras. Fue el 10 de octubre y supuso, curiosamente, su primera victoria como local. Aquel día comenzaron bien los arlequinados, con un buen gol de Fran Matos a los dos minutos, pero poco a poco se desinflaron. Couñago empató a la media hora y no fue hasta el minuto 93 cuando llegó la alegría a la grada de A Lomba. Fue, por supuesto, en tras un saque de esquina -las acciones a balón parado están sacando a los vilagarcianos de muchos atolladeros- cuando Rivas puso el 2-1.
Éxtasis contra el As Pontes
Si contra el Alondras quien más quien menos de entre los seguidores arlequinados se conformaba con el empate y se llevó una buen alegría con el tanto del triunfo, el encuentro contra el As Pontes se lleva la palma en la fe que los arlequinados parecen tener en sus posibilidades. A falta de un cuarto de hora para el final, el marcador señalaba un 0-2 que presagiaba un inesperado tropezón en A Lomba. Pero en ese cuarto de hora final surgió la magia. Primero Rivas, tras un saque de esquina por supuesto, luego Sidibé (en el minuto 89 y de nuevo tras un córner) y más tarde Eloy (ya en el 95 y de nuevo tras un lanzamiento desde la esquina) culminaban la remontada que, además, tuvo su punto de dramatismo puesto que Cabanyes marró un penalti.
Los dos últimos partidos en los que el Arousa sacó provecho de su esprint final son, precisamente, lo más inmediatos. El primero, el pasado domingo 27 de noviembre ante el Barco. De nuevo tras un saque de esquina. El balón cayó a los pies de Julio Rey y el canterano lo colocó en la cabeza de Sidibé, que batió a Vicente. Corría el minuto 91 y la leyenda de la alianza entre los arlequinados y el tiempo de descuento comenzaba a crecer, aunque ahora, tras lo sucedido el domingo de nuevo en A Lomba y con el Vilalbés como rival, ya es imparable.
En el campo vilagarciano ya nadie se levanta de su asiento hasta que el colegiado pita el final. Y a quién tenía dudas se le disiparon en la última comparecencia en A Lomba. De nuevo, el rival se puso por delante. De nuevo, el Arousa marró un penalti -cierto es que en este caso en la primera mitad- y de nuevo el tanto llegó en el tiempo de prolongación. Sobra decir que tras un saque de esquina. En esta ocasión fue Cabanyes el que acertó a batir al guardameta rival para colocar el 1-1. En esa atmósfera especial que comienza a surgir en A Lomba en los últimos minutos del partido todos creyeron que otra remontada mágica era posible. En esta ocasión, sin embargo, no hubo tiempo para más.