«Sé lo duro que es ser cuidador dado que yo lo fui de mi padre ocho años»

m.?h. VILAGARCÍA / LA VOZ

AROUSA

21 sep 2016 . Actualizado a las 04:00 h.

Ana Granja, presidenta del colectivo vilagarciano Afasal, es de esas personas que no necesitan que le cuenten nada sobre el día a día del alzhéimer. Desafortunadamente, se lo enseñó todo su padre, que padeció esa demencia y al que ella cuidó durante ocho años. Fue por él por quien se metió en Afasal. Ahora recuerda esa etapa de su vida con cariño pero indica: «El cuidador pasa por momentos durísimos. Yo sé lo que es dado que lo fui de mi padre ocho años. Hay cosas que se te quedan grabadas en el alma... Me acuerdo del primer día que no me conoció. Fue terrible». Ella se vio apoyada por su familia. Pero también se dio cuenta de que no había demasiados apoyos para quienes viven una situación familiar así de dramática. «Si tienes dineros hay recursos. Si no... Pocos», dice. Quizás por eso lleva cuatro años comandando el ejército Afasal, que persigue que la atención a los enfermos y cuidadores sea accesible al mayor número de bolsillos posible. Ayer, Ana hablaba de que tienen que mejorar muchas cosas y se acordaba especialmente de los cuidadores: «Hay personas que están peor que el propio enfermo, que sufren muchísimo», señaló.

Antes de terminar, Granja sentencia: «Cuando pasa y miras atrás recuerdas todo bonito, pero en el momento en que estás cuidando a alguien es muy complejo. Hay que ayudar». Con ese objetivo, Afasal volverá a salir hoy a la calle para recaudar fondos y dar asesoramiento. «A veces, la gente simplemente necesita ser escuchada», indica ella.