Ravella se ve obligada a recortar las canastas del pabellón de Castelao

Antonio Garrido Viñas
antonio garrido VILAGARCÍA / LA VOZ

AROUSA

La apertura de la instalación se retrasa al menos hasta mediados de febrero

30 ene 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

Las primeras lluvias de la semana han permitido realizar las comprobaciones para saber si las reparaciones que realizó la concesionaria han eliminado las goteras y filtraciones que presentaba el pabellón de Castelao. A media mañana todo parecía ir mejor. Las goteras no habían reaparecido, aunque una lágrima de agua amenazaba con colarse a través de la grieta de una de las bajantes. El examen, pese a todo, continuará durante varios días más porque, aseguran desde el gobierno local «no se puede comprobar de un día para otro». Serán los técnicos municipales quienes decidan cuándo todo está en orden. «La primera interesada en que abra el pabellón es la Fundación de Deportes», apuntan desde Ravella.

El panorama, sin embargo, no invita al optimismo. Más allá de que la empresa concesionaria finalmente haya podido solventar los problemas de goteras y filtraciones que aparecieron en los últimos días, los trabajos a realizar para poner el punto y final a la obra llevarán más de un día. Otras fuentes municipales señalan el horizonte de mediados del mes de febrero como el margen mínimo para que la instalación abra sus puertas si todo va bien y no aparece algún problema más.

Una de esas tareas de última hora es la de recortar las canastas destinadas a las pistas de minibásquet. Las previsiones con las medidas fueron demasiado optimistas y las pistas que se han pintado a lo ancho de la instalación entran con calzador. Dos tienen las medidas correctas pero van tan al límite que las líneas de fondo están a poco más de un metro de la pared. Esta circunstancia obliga a actuar en los soportes de las canastas, que deberán ser reformados. Lo sorprendente es que se haya esperado hasta ahora para hacer este trabajo, que está totalmente al margen de los problemas que han aparecido con las goteras y las humedades. La tercera de las pistas, que se ha pintado en los últimos días, es menor que las otras dos y valdrá únicamente para entrenamientos.

Otra de las tareas que los operarios deberán acometer en los próximos días es la del pintado del espacio que ejerce de recibidor en el pabellón. El lugar que está más próximo a los baños públicos deberá ser pintado también en los próximos días. En definitiva, pequeñas tareas pero que no se hacen de un día para otro.

 

 

La inauguración

 

El nuevo retraso en la apertura del pabellón ha roto las previsiones de la Fundación de Deportes, que había anunciado a mediados de este mes de enero que la instalación se abriría esta semana. De hecho, una de las posibilidades que se estudiaron como acto de inauguración era la organización de la fase final gallega de la categoría alevín, que se celebrará el primer fin de semana del mes de febrero.

El pabellón se cerró en el mes de mayo del año pasado. La primera fecha que se dio desde el Concello para su apertura fue el mes de octubre. A partir de ahí, llegaron toda una serie de problemas que han dado con que la instalación siga todavía cerrada ocho meses más tarde.