El reló regresa a las lonjas de Arousa tras siete años ausente

Rosa Estévez
rosa estévez VILAGARCÍA / LA VOZ

AROUSA

El reló fue apartado de la nómina de mariscos comerciales en el año 2008.
El reló fue apartado de la nómina de mariscos comerciales en el año 2008. martina miser< / span>

En la última semana se han subastado dos toneladas de este bivalvo

14 ene 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

La situación del marisqueo a flote en la ría es tan desesperada que los rañeiros arousanos parecen estar dispuestos a agarrarse a un clavo ardiendo. Ese clavo es la posibilidad dada por la Consellería do Mar para extraer reló de 30 a 35 milímetros en varias zonas de libre marisqueo. La tarea no es fácil: el reló de ese tamaño no abunda en los fondos y, para llevarlo a tierra, es necesario hacer un intenso trabajo de selección. Pero los rañeiros parecen estar dispuestos a hacer ese esfuerzo. En los últimos días se han comercializado en las lonjas de Arousa Sur más de dos toneladas de esta especie, que siete años atrás era un complemento decisivo para la nómina de los mariscadores.

El reló ha vuelto a las lonjas a unos precios modestos. De momento, la cotización máxima por el kilo se ha pagado en Cambados: 1,76 euros. En esta lonja es donde ha alcanzado el producto sus mejores valores, quedándose la media en 1,25 euros por kilo. Eso sí, los precios bajaron el pasado lunes, cuando el bivalvo se vendió a 0,70 euros. En A Illa, ese mismo día, se vendía el kilo a medio céntimo.

Las cifras, está claro, no son deslumbrantes. Pero algo es algo. «Hai que ter en conta que hai que volver a abrir o mercado desta especie», explicaban ayer desde la lonja de Cambados, que es también en la que más marisco de este tipo se ha vendido de momento. También el patrón mayor de A Illa, Juan Rial Millán, es consciente de que la comercialización del reló exigirá reconquistar los mercados que perdió cuando fue expulsado de ellos por su tendencia a acumular plomo.

Pero el espacio que perdió en tierra l quedarse fuera del listado de especies comerciales, lo ha ganado el reló en los fondos. Esta especie se ha extendido por los bancos de toda la ría. Eso provocó que las cofradías, acuciadas por la necesidad y por los malos resultados de la campaña marisquera, volviesen sus ojos hacia ese producto. Esta vez, además de solicitar a la Xunta que realizase análisis y estudios, los pósitos encargaron sus propias pruebas, que dictaminaron que en varias zonas de la ría el marisco estaba con buenas condiciones para su comercialización. Con esos resultados en la mano reformularon su solicitud a la Consellería do Mar, que el 16 de diciembre les comunicaba la buena nueva: podrían volver a capturar reló, pero con condiciones.

Las limitaciones son claras: las piezas que lleguen al mercado deberán medir entre 30 y 35 milímetros, y deberán ser extraídas de zonas muy concretas. En estos momentos, se captura en las zonas de libre marisqueo.