Un grupo de sintecho toma un edificio y el temor se extiende por Doctor Tourón

Susana Luaña Louzao
susana luaña VILAGARCÍA / LA VOZ

AROUSA

El edificio está a la entrada de la calle, al lado de la iglesia parroquial y pegado a otras casas.
El edificio está a la entrada de la calle, al lado de la iglesia parroquial y pegado a otras casas. mónica irago< / span>

Las peleas son continuas e incluso prenden fuego por la noche, lo que podría dar lugar a un incendio

20 nov 2014 . Actualizado a las 08:01 h.

En la retina de los vecinos de Doctor Tourón, Paseo Costa Candamo y Plaza de España quedó grabado lo ocurrido hace meses en Rosalía de Castro, cuando ardió una vivienda que llevaba semanas ocupada por indigentes y drogadictos. Entonces, no hubo que lamentar daños personales, porque los edificios que la rodean también están deshabitados. Pero la avenida Doctor Tourón es otra historia. Cientos de vecinos viven en las inmediaciones del número 3, un inmueble que lleva tiempo vacío y abandonado y que ahora tomaron los sintecho. Ese no es el principal problema. La verdadera preocupación de los residentes en la zona son las peleas que se suceden de noche y que incluso prendan fuego para calentarse. De provocar un incendio, no serían ellos los únicos damnificados.

La historia empezó hace más o menos diez días, cuando un grupo de sintecho -algunos habituales de Vilagarcía y otros más que supuestamente se unieron a la cuadrilla- lograron salvar el muro que rodea la vivienda y que impedía el acceso al interior y empezaron a hacer uso de la vieja casa. Poco a poco llegaron las transformaciones; según los vecinos, rompieron el candado de la puerta de entrada y tiraron algunas de las rejas que protegían las ventanas, hicieron cambios en el interior y acumularon muebles en el muro para poder acceder desde allí al inmueble.

Peleas continuas

Pero tampoco es por eso por lo que se quejan los vecinos de la zona. Lo que realmente preocupa al vecindario es que la tranquilidad se ha ido del barrio al mismo tiempo que ellos llegaron. El ruido por las noches es continuo, y las peleas entre los nuevos inquilinos de la casa, diarias. Por esas cuestiones ya llamaron en más de una ocasión a la policía, y son conscientes de que alguna vez la patrulla se pasó por el lugar, pero los sintecho no fueron desalojados y la situación sigue siendo la misma.

Lo peor es que llegó el frío, y en las últimas noches, se supone que para entrar en calor, hicieron fuego dentro de la casa, y eso es lo que acabó con la paciencia de los que viven en los alrededores, porque temen que provoquen un incendio y que haya que lamentar males mayores.

Lo dicho. Se acuerdan de lo que pasó en abril, cuando un grupo de transeúntes tomó una vieja casa de A Compostela, junto al Balneario, y por la noche provocaron un incendio que arrasó el edificio.

Como en el caso de A Compostela, la casa está llena de escombros, muebles viejos y vigas de madera que arderían de inmediato, lo que podría dar lugar a un suceso de dimensiones difíciles de calcular si un fuego de ese tipo tiene lugar en el centro de Vilagarcía, en el corazón del casco urbano. Piden, por lo tanto, que se tomen medidas y los okupas sean desalojados.