Los alumnos de Carril continúan sin pasos de peatones dos semanas después del inicio del curso escolar
23 sep 2014 . Actualizado a las 11:40 h.Transcurrida la urgencia de los argumentos ciclistas, el futuro del asfaltado de Rosalía de Castro continúa en el aire. Ayer, los responsables municipales de Vilagarcía telefonearon a la jefatura territorial de la Consellería de Medio Ambiente, Territorio e Infraestruturas. Querían interesarse por la ausencia de los técnicos autonómicos que el viernes tendrían que haber inspeccionado el resultado de las obras pero no hicieron acto de presencia. Fuentes de Ravella reconocen que el departamento de Pontevedra ni siquiera devolvió la llamada.
Así las cosas, tanto los alumnos del colegio Rosalía de Castro, en Carril, que iniciaron el curso hace dos semanas, como sobre todo los del instituto Miguel Ángel González Estévez, que carecen de alternativas para acceder al centro, continúan cruzando la avenida sin pasos de peatones, eliminados por el controvertido pavimentado, con el riesgo que algo así implica a diario.
El bipartito conservador mantiene su confianza en que la Xunta cumplirá su compromiso de dejar los tres kilómetros de vial en condiciones para que su titularidad pueda ser asumida por el Concello. No obstante, el paso del tiempo sin más noticias que un cúmulo de contradicciones -la duración de las obras se extendió a dos semanas cuando deberían haberse finalizado en dos días; ni las glorietas ni las zonas de aparcamiento han sido asfaltadas; se pintó la delimitación de los carriles pese a que teóricamente no era posible hasta transcurridos quince días-, ofrece plena actualidad a la moción en la que el BNG exige a Ravella que renuncie el traspaso de Rosalía de Castro y Juan Carlos I ante tanta incertidumbre.