Cientos de alumnos de Cambados dan gimnasia en precario por las obras

Bea Costa
bea costa CAMBADOS / LA VOZ

AROUSA

MONICA IRAGO

En el Antonio Magariños esperan poder estrenar la remozada pista exterior en octubre mientras que en el IES Cabanillas tendrán que esperar 4 meses

23 sep 2014 . Actualizado a las 08:51 h.

Algunas cosas no cambian. ¿Por qué las obras en los colegios no se hacen durante el verano y se espera a que comience el curso para colocar los andamios y los ladrillos? En Cambados no es uno sino dos los centros que están en esta situación. En el colegio Antonio Magariños han desmantelado ya el techo de la pista cubierta para colocar uno nuevo mientras que en el instituto Ramón Cabanillas las obras para reparar el pabellón ni siquiera han empezado, y nadie sabe cuándo lo harán. En este caso el plazo de ejecución es de cuatro meses.

En el instituto no tienen noticias y el propio presidente de la Diputación de Pontevedra, Rafael Louzán, reconocía el jueves que los trabajos tendrían que haber empezado ya hace semanas y no se explicaba el motivo de que la empresa adjudicataria no haya dado señales de vida.

No es habitual que el organismo provincial asuma las obras en un pabellón escolar, pero en el Cabanillas y en el Concello poco les importa quién haga la obra, si la Diputación o la Consellería de Educación, siempre que se haga. Y este pabellón de deportes la estaba pidiendo a gritos. Allí se va instalar una nueva cancha, se construirá un graderío y se revestirá el muro exterior. De la mejora no solo se van a beneficiar los alumnos. En horario de tarde-noche, estas instalaciones son utilizadas por los equipos de vóley y fútbol femenino, entre otros, de ahí el alcance de esta intervención.

Encaje de bolillos

Pero las obras no son gratis, en ningún sentido. En el instituto todavía no saben muy bien cómo se las van a arreglar para impartir la asignatura de Educación Física durante el primer trimestre del curso, plazo que se calcula durarán los trabajos. Por de pronto, ya han alterado los horarios habituales para juntar en una única clase las dos horas de gimnasia a la semana que corresponden a todos los cursos, con la excepción de segundo de Bachillerato. Se hizo de este modo para rentabilizar el tiempo en caso de que los alumnos tengan que acudir al pabellón o a las pistas de atletismo de O Pombal para hacer gimnasia. Desde el Concello de Cambados anuncian su total colaboración a la hora de poner a disposición las instalaciones municipales, pero hay que hilar fino para conciliar todos los intereses en juego. Pabellón solo hay uno y la demanda es alta, de modo que habrá que organizar los horarios.

El alcalde Luis Aragunde también anunció su intención de reunirse con la empresa constructora para pedirle que adapte las obras a las peculiaridades del instituto, de manera que se pueda utilizar el pabellón, en su totalidad o en parte durante unas horas, siempre y cuando la dinámica de los trabajos lo permita.

Se aventuran unos meses complicados que obligarán a los profesores de gimnasia a hacer encaje de bolillos para impartir su asignatura. Pero ya se sabe que no hay mal que por bien no venga, de forma que en el centro dan por bien empleado el esfuerzo si ello conlleva disponer en el futuro de unas instalaciones mucho mejores que las actuales.

En el colegio Antonio Magariños hacen una lectura parecida. Llevan años esperando a que la Consellería de Educación repare la pista exterior, y por fin las obras llegaron este verano. En este centro llevan dos cursos dando las clases de Educación Física en las aulas siempre que llueve, porque la pista resbala y no reúne las condiciones mínimas de seguridad. Así pues, el curso 2014-2015 arranca en las mismas condiciones que el anterior porque, mientras se ejecutan las obras, los chavales tendrán que seguir haciendo gimnasia dentro de las aulas. Se calcula que esta situación se prolongará hasta finales de octubre, como muy tarde. Entre tanto, también ha habido que variar los turnos de los recreos y los horarios de entrada al colegio, dado que el espacio del recinto escolar se ha visto reducido y los chavales tienen que entrar de forma escalonada.

Esta semana las obras han estado paradas porque, según las noticias de que dispone la dirección del centro, la empresa constructora está haciendo acopio de los paneles que se van a instalar en el techo de la pista deportiva.