La maleza invade las obras del pabellón de deportes de O Grove

Rosa Estévez
rosa estévez O GROVE / LA VOZ

AROUSA

ROSA ESTEVEZ

El alcalde confía en que los trabajos se retomen en el mes de septiembre

23 ago 2014 . Actualizado a las 06:50 h.

Hace cinco meses, el reloj se paró en Monte da Vila. La unión de empresas a las que se le había encomendado la construcción del nuevo pabellón de deportes renunció a seguir con un proyecto para el que, según dijeron, no les llegaban los 1,3 millones de euros en los que se había presupuestado la obra. Las máquinas se pararon, dejando la construcción a medias cuando el nuevo pabellón ya tendría que haber sido inaugurado. Los obreros se fueron dejando tras de sí una estructura a medio levantar de la que ya se han adueñado la maleza y el abandono.

Casi medio año después de que los obreros abandonasen Monte da Vila, las hierbas crecen en lo que, algún día, será la pista por la que llevan años suspirando los deportistas locales. La vegetación se abre paso entre restos de plásticos, palés destrozados por el paso del tiempo y material apilado sin ton ni son. Bajo la estructura blanca que en el futuro soportará la cubierta del edificio deportivo, una grúa parada preside, grave, un espacio delimitado, en uno de sus laterales, por unas gradas cubiertas con una lona cuyo color azul ha sido descolorido por el viento y la lluvia. Esas gradas deberían haber sido ya estrenadas. En concreto, y si se hubiesen cumplido los plazos iniciales, tendrían que llevar desde el pasado mes de diciembre sirviendo de acomodo para los espectadores.

Cuando la empresa incumplió el primer plazo de entrega, el Concello no se alarmó especialmente. Pero cuando la firma solicitó nuevas prórrogas y el ritmo de los trabajos comenzó a menguar, fue la Administración local la que se dirigió a la Xunta para pedirle que metiese un poco de prisa a la adjudicataria de las obras. No sirvió de nada: la unión de empresas acabó renunciando a rematar un pabellón que parece querer seguir haciéndose esperar por los vecinos.

Pero la espera, dicen desde el Concello, no será eterna. El alcalde de O Grove, Miguel Ángel Pérez (PP), mostró ayer su confianza en que los trabajos se retomen pronto. Explica el regidor grovense que la Xunta, tras haber habilitado una nueva partida para poder rematar las obras, «ha hablado con las empresas que en su día se habían presentado al concurso a fin de acelerar todo el trámite de renuncia y adjudicación de los trabajos, y esperamos que estos se retomen en septiembre».

A ver si es cierto. Mientras tanto, alrededor de los flamantes muros del futuro pabellón, los arbustos, que ya alcanzan una altura importante, siguen creciendo.