El Concello recuerda las normas que hay que respetar en la Festa da Auga
15 ago 2014 . Actualizado a las 20:51 h.Mañana es día de obligada diversión, pero sin olvidar que se debe respetar a quienes prefieren vivir la fiesta de una manera más tranquila y optan por lo actos religiosos sin intención de mojarse. Por eso tanto el Concello de Vilagarcía como la comisión de fiestas «Auga que non has de beber» recuerdan un año más tanto las normas de convivencia como las de seguridad que se deben respetar en la jornada de mañana y que se pueden consultar tanto en la web municipal como en los programas de fiestas y en los tableros con el programa distribuidos por la ciudad.
La Festa da Auga empieza cuando el santo entra en la iglesia de San Roque y el pregonero lanza el primer cubo de agua desde el camión de bomberos situado junto a la capilla. Por eso, mientras se celebra la procesión, se debe respetar el paso de la comitiva sin lanzar agua. Ya a lo largo de la celebración, el lanzamiento debe limitarse a la zona húmeda.
En cuanto a la indumentaria, debe llevarse ropa cómoda y ligera y calzado cerrado para evitar deslizamientos. Los pasos de peatones y zonas con pintura suelen dar lugar a resbalones al estar mojadas, de ahí que se deba extremar la precaución.
No se debe arrojar agua del suelo a los participantes, porque está sucia y porque puede llevar arenas u otros elementos que pueden hacer daño en los ojos. Tampoco se pueden utilizar recipientes de cristal porque corren el riesgo de romper y provocar cortes y heridas. Se recomienda, además, evitar llevar teléfonos móviles que pueden estropearse o dinero en billetes que se rompan al mojarse. Y ante cualquier problema, tanto la policía como el personal de emergencias estará a disposición de la gente entre la muchedumbre. También se puede contactar con ellos a través del 112.
Por supuesto, en la normas también se incluye evitar cualquier gamberrada o acto vandálico. La víspera, ya los hubo. Las lonas de varias atracciones de feria aparecieron por la mañana rajadas, tal y como tuvo que informar, desgraciadamente, el servicio municipal de emergencias.