La entidad deportiva se hace cargo desde ayer de la estructura marítima
09 ago 2014 . Actualizado a las 06:50 h.La pantalán del Real Club Náutico de Sanxenxo en el puerto deportivo recibió ayer la aprobación de los técnicos de Portos de Galicia, que inspeccionaron la obra y certificaron que la infraestructura ejecutada se ajusta al proyecto. Así pues, se firmó el acta de fin de obra, con lo que la entidad sociodeportiva puede utilizarla dentro de los términos de la concesión otorgada en su momento por la Administración autonómica. El gerente del Náutico, Roi Álvarez, explicó: «Los técnicos de Portos inspeccionaron las obras y concluyeron que está ok y conforme al proyecto».
A partir de ahora, el pantalán del Náutico se convertirá en uno de los ejes principales de su actividad. Como ejemplo, Roi Álvarez indicó que este fin semana se celebrará la regata del Hotel Carlos I Carlos, mientras que el próximo le tocará el turno a la regata Martín Códax Rías Baixas.
Con la firma realizada ayer, se pone fin a un largo proceso que comenzó en mayo del 2003, cuando la cofradía de pescadores y el Náutico pidieron por primera vez a Portos la colocación de unos pantalanes en el puerto deportivo de Sanxenxo. En el 2011, se solicitó la concesión y el ente autonómico autorizó el inicio del expediente. En julio se dio el visto bueno a la instalación flotante y en agosto de ese año se aprobó el proyecto básico, con 124 plazas. Al año siguiente, Portos otorgó la concesión definitiva al Náutico de Sanxenxo y aprobó el proyecto constructivo, comenzando las obras en abril.
Dos cambios de proyecto
La polémica vecinal que se desató, con el apoyo del Concello, inclinó al Náutico a modificar el proyecto, con el visto bueno de Portos. La entidad deportiva renunció a la zona de pantalán más próxima a la playa de Panadeira, alegando la existencia de «una sensibilidad especial con esa parte de la instalación». Se pasó de 124 plazas a solo 61. Los vecinos opuestos a la infraestructura se agruparon en torno a la plataforma SOS Panadeira al rechazar la totalidad del proyecto.
En el verano del año pasado se reanudaron las obras, pero Portos y el club pactaron la paralización cautelar esperando la deriva judicial del asunto, que en octubre se falló a favor del pantalán. Los trabajos se retomaron en enero de este año a pesar del rechazo de la plataforma y del Ayuntamiento.
Sucesivos incidentes en el puerto remataron cuando el Juzgado ordenó a la Guardia Civil que pusiese fin a la alteración del orden público y permitiese la continuidad de los trabajos. Para evitar polémicas, se modificó otra vez el proyecto, liberando Os Barcos de los pivotes del acceso, que se desplazó a la rampa portuaria. Esta fue la última fase, que remató la semana pasada.