Pazo Baión, ejemplo de arte y cultura

Maruxa Alfonso Laya
m. alfonso CAMBADOS / LA VOZ

AROUSA

Condes de Albarei encargó a César Portela la restauración de Pazo Baión cuando lo adquirió, en el año 2008.
Condes de Albarei encargó a César Portela la restauración de Pazo Baión cuando lo adquirió, en el año 2008. mónica irago< / span>

César Portela explicó los secretos de la restauración de la emblemática finca

17 jul 2014 . Actualizado a las 06:52 h.

Los alumnos del curso de «Arte, historia, xeografía e cultura na comarca do Salnés», certificado por la Universidad de Santiago de Compostela, pudieron ayer descubrir los secretos de uno de los principales atractivos turísticos de la comarca, Pazo Baión. Fue el arquitecto César Portela, autor de la restauración de esta singular finca, el encargado de contarles la historia de la misma y el proceso que ha permitido devolverle a ese entorno el esplendor perdido.

Los estudiantes pudieron conocer los devenires del pazo. Cuentan los responsables de Condes de Albarei, que adquirieron este entorno en el año 2008, que los orígenes de Baión se remontan al siglo XV. Por él han pasado reconocidas familias nobles, como los Sarmiento, los Soutomaior, los Figueroa o los Valladares, dejando su impronta en la propiedad. Pero no fue hasta principios del siglo XX que el pazo incorporó parte de los elementos que mantiene en la actualidad. Un emigrante gallego retornado de Argentina construyó unos edificios de gran riqueza arquitectónica, con destino a bodega y vaquería. De esta época es también el palmeral, que se encuentra entre los viñedos simulando un paraíso del vino. En el año 2008 es Condes de Albarei quien adquiere la finca y le encarga a Portela la rehabilitación de todo el conjunto.

Según explicó el propio arquitecto, en la restauración de todo este entorno se buscó integrar la arquitectura y el paisaje vitivinícola, ya que esta propiedad, de 30 hectáreas de superficie, posee uno de los viñedos más espectaculares del panorama vinícola mundial. Desde que las obras terminaron, este entorno se ha convertido en el principal centro de enoturismo de la comunidad gallega. Cada año, miles de personas recorren sus viñedos, pasean por sus instalaciones y prueban el vino que se elabora en esta bodega.