A las aguas de A Compostela se suman siete más en Cambados y O Grove
17 jul 2014 . Actualizado a las 07:00 h.Las aguas de O Salnés pueden presumir de excelencia. No es novedad, porque en los análisis de la Xunta suelen alcanzar los mejores resultados. Todos los años se establecen controles en 210 zonas de baño de la comarca, desde Valga hasta O Grove y Sanxenxo, y la mayoría suelen dar resultados excelentes, tal y como muestra el mapa de zonas de baño de Galicia que permanentemente actualiza el departamento de Innovación e Xestión da Saúde Pública, dependiente de la Consellería de Sanidade. Sin embargo, hay nueve que se resisten y en las que la calidad del agua no supera la calificación de buena o suficiente, y en más de una ocasión, su mal estado obligó a cerrarlas temporalmente al baño. Dos están en Vilagarcía, y casi todo el mundo sabe que se trata de A Concha y de A Compostela, que perdieron hace años la bandera azul precisamente por esa baja calidad del agua, al margen de que se produzcan o no vertidos.
Otras cuatro están en O Grove; son Ponte da Toxa, Peralto, O Espiño y Seixeliño; en los controles continuados del último año, las tres primeras solo lograron un suficiente, mientras que la última alcanzó la calidad de buena.
Las dos zonas de baño marítimas que faltan se ubican en Cambados; tanto en Santo Tomé como en O Facho, el agua suele ser buena, pero nunca excelente. Y el mapa gallego incluye otra más que es de carácter fluvial; se trata del río Umia, a su paso por Ribadumia, donde el agua tampoco supera la calificación de buena.
Los análisis que llevan a cabo los farmacéuticos inspectores dan lugar al cierre de una zona de baño cuando en esas pruebas se detectan valores superiores a 1.500 unidades formadoras de colonias -parámetro para medir la contaminación de las aguas- por cada cien mililitros. En ese caso, se avisa de inmediato al Concello afectado y se realiza un segundo análisis. Si la contaminación se mantiene, se recomienda no bañarse en esa zona mientras dura el episodio.