Los técnicos coinciden en que esta no será una añada muy abundante
01 jul 2014 . Actualizado a las 06:54 h.La inestabilidad meteorológica mantiene a viticultores y técnicos de Rías Baixas pendientes del cielo. Las lluvias, acompañadas de altas temperaturas, no están favoreciendo demasiado la cosecha de este año y han ocasionado ya las primeras pérdidas. Y es que durante la floración llovió y, ahora, son las plagas las que acechan al viñedo. Condiciones que hacen que los técnicos se aventuren a confirmar que esta no será la cosecha más abundante de la denominación de origen.
«De forma xeral, durante a floración houbo pequenas mermas por corremento de flor», explica Alberto Barral, director técnico de Condes de Albarei. «Choveu durante a floración, pero creo que estamos ante unha colleita normal», añade Miguel Tubío, director técnico de Martín Códax. Ambos coinciden en destacar que todavía es demasiado pronto para hacer un diagnóstico, sobre todo, porque la inestabilidad meteorológica provoca que la situación cambie día a día. Pero sí que se atreven a confirmar que esta no será una de las cosechas más abundantes de la denominación de origen. «Non hai trazas de que vaia ser unha colleita moi abundante, pero aínda é moi cedo para facer aproximacións», asegura Barral.
Como lleva sucediendo desde que la vid comenzó a brotar, lo que está volviendo loco al sector es la inestabilidad meteorológica. «As previsións meteorolóxicas non son moi fiables», añade Tubío. Y destaca que «levamos anos cunha estabilidade boa e agora non son fiables nin a tres días vista», argumenta.
Según explica la página de la Estación Fitopatolóxica de Areeiro, en O Salnés se siguen dando las condiciones meteorológicas adecuadas para que se desarrollen las distintas plagas que afectan al viñedo. El calor y la humedad son más que propicios para que el mildiu y el oídio comiencen a hacer estragos. Por fortuna, los viticultores están muy pendientes y varios han sido ya los tratamientos que se han aplicado para evitar que las enfermedades dañen a la futura cosecha. El problema es que para aplicar estos productos hay que espera a que no llueva y, como las condiciones meteorológicas no son fiables, muchos se vuelven locos esperando para tratar sus parcelas. «Estos días están aparecendo síntomas de mildiu nos ácimos, pero xa estábamos pendentes de que apareceran», explica Barral. «Hai un alto risco de mildiu, pero non é nada anormal», añade Tubío.
En lo que también están de acuerdo estos dos técnicos arousanos es en que, por ahora, la cosecha es muy distinta dependiendo de las parcelas en la que se ubique el viñedo. También destacan que va dos o tres semanas por delante de la del año pasado, cuando hubo una primera mucho más fría que retrasó considerablemente todo el proceso de la vid.