Para los hosteleros de O Grove no solo la crisis económica es la responsable de la caída que han registrado las ventas en Semana Santa. Las malas condiciones climatológicas de los últimos años han sido también culpables de que O Grove sea un destino que cada vez se venda menos. A pesar de todo, el sector confía en que las cifras de este año muestren una recuperación.
«Es cierto que la cosa se puso fea desde el 2008», explica Beatriz Castro, presidenta de la asociación de hotelería. Sin embargo, aunque considera que la crisis puede tener parte de la culpa, también lo achaca a las malas condiciones meteorológicas de los últimos ejercicios. «En los últimos años, el tiempo no ha sido nada bueno», sostiene. Y reconoce que la situación tocó fondo durante el pasado ejercicio. «La Semana Santa del año pasado fue catastrófica», argumenta.
Otra característica de los últimos años es que ha cambiado notablemente la duración de la estancia. Antes, explica Castro, los turistas venían por toda la semana. Ahora, esos casos son casi anecdóticos y, la gran mayoría, reserva por tres o cuatro noches. «Ahora vienen el jueves y el domingo se van porque la Semana Santa es solo un fin de semana», afirma la presidenta de los hosteleros mecos.
A pesar del descenso que el sector ha experimentado en los últimos años, Castro confía en que la situación se recupere notablemente durante la actual Semana Santa. Y es que las previsiones, al final, no eran tan malas. A mediados de semana, buena parte de los hoteles tenían reservado alrededor del 60 % de sus habitaciones. «Yo me lo esperaba porque después del invierno que tuvimos, con tanta lluvia, la gente está deseando salir», argumenta. De hecho, añade, las previsiones pasaban porque en O Grove se incrementara también el número de hoteles que están disponibles en estas fechas. «Este año, de nuestros asociados, solo hay dos cerrados. El año pasado eran siete u ocho los que no abrían», concluye la presidenta. Pero, como siempre, los resultados definitivos están en manos de las condiciones meteorológicas.
«Yo también lo achacaría a que desde el 2008 el tiempo no fue nada bueno»
Beatriz Castro