Los cien tesoros que José Burés ha regalado al Concello de Valga

Rosa Estévez
rosa estévez VILAGARCÍA / LA VOZ

VALGA

MONICA IRAGO

El complejo de la Bella Otero albergará los aperos reunidos por el anciano

01 nov 2013 . Actualizado a las 06:54 h.

Hasta que el cuerpo pidió descanso, José Burés consagró sus días a trabajar el campo. Este vecino de Valga era un labrador orgulloso de serlo. Tan orgulloso, que poco a poco fue reuniendo en su casa aperos que hablaban de arar la tierra, de sembrarla, de cultivarla para sacarle provecho. Su colección supera el centenar de piezas, y José O Rato, pese a haber cruzado ya la frontera de los noventa año, reconoce en todas ellas la historia de cómo llegaron a sus manos.

José siempre ha presumido de su museo particular. Con gusto se lo mostraba a quien llamaba a su puerta para interesarse por una colección que habla de las tradiciones y la forma de vida de Valga y sus vecinos. Él no tiene hijos, y hace unos meses aún no tenía muy claro qué iba a ser de sus tesoros cuando él faltase. Pero O Rato ya ha encontrado una solución a su dilema. Hace unas semanas se puso en contacto con el Concello y les ofreció su legado. «Resulta emocionante recibir este regalo dun veciño», reconoce el alcalde de Valga, José María Bello Maneiro.

En el último pleno, el Ayuntamiento acordó aceptar el regalo, asumir la responsabilidad de cuidar del legado de Burés, y mostrar su agradecimiento a un anciano que nunca le ha negado nada a sus vecinos. En los próximos días, explica el regidor, se oficializará la cesión. «Segundo o acordo ao que chegamos, o Concello comprométese a coidar esas pezas, a expolas ao público e a conservalas, e no caso de que incumpra esas obrigas terá que devolvelas», explica el alcalde de Valga. Pero no será el caso, porque Valga va a «cuidar con cariño» ese material de museo. Para empezar, en los próximos días, y siguiendo los deseos de su propietario, todas estas joyas etnográficas pasarán a ocupar un espacio en el complejo de la Bella Otero. Seguro que a José Burés se le escapará una sonrisa pícara cuando vea sus aperos colocados a las puertas de la casa de la bailarina más arrebatadora de la Belle Époque.

«Estamos mirando para colocar unhas cámaras de seguridade. Queremos que todo se faga ben. Despois de toda a ilusión que puxo José ao reunilas, nós imos coidalas como se merecen», explica Bello Maneiro. A fin de cuentas, es un tesoro que bien vale la pena cuidar. «Valga é unha localidade moi vencellada á terra».

El alcalde asegura que la colección será tratada «con moito cariño» por el Concello