El vapor «Hidria» logra el dinero para volver a casa

m. b. vilagarcía / la voz

AROUSA

CEDIDA

Sus propietarios recaudan los 6.000 euros que necesitaban con los microcréditos y ya preparan el retorno a O Grove

26 jun 2013 . Actualizado a las 06:53 h.

De vuelta a casa. En unos días, el Hidria Segundo, el emblemático barco de vapor que durante años surcó las aguas de Arousa, dejará el Puerto de Santa María, en Cádiz, para retornar a su O Grove natal. Lo hará gracias al apoyo de decenas de ciudadanos que apoyaron económicamente a los propietarios de la embarcación, Jacobo Costas y María José Otero.

Ambos recurrieron a la web www.lanzanos.com para conseguir la financiación precisa para emprender el viaje de vuelta. Necesitaban 6.000 euros. ¿El mecanismo? Las aportaciones de particulares dispuestos a colaborar con cantidades que oscilaban entre los diez y los 500 euros. A cambio, Jacobo y María José ofrecían a los donantes la posibilidad de vivir la experiencia del Hidria.

Así las cosas, a lo largo de los últimos setenta días fueron recibiendo multitud de aportaciones de ciudadanos anónimos hasta completar la cantidad establecida. Sin embargo, no todo fue un camino de rosas. Y es que los inicios fueron titubeantes, y la propia María José Otero reconocía ayer que albergaron serias dudas porque «la cosa no arrancaba». Finalmente, el desenlace fue el esperado y ayer contaban ya con 6.450 euros. Una cantidad que aún podría engordar más ya que, aunque el plazo de setenta días culminaba ayer, la web ha dado otra semana de plazo más para captar donativos. «Esperamos conseguir algo más de dinero para adecentar el barco, pintarlo...», explicaba satisfecha la propietaria del Hidria Segundo.

Los 6.000 euros que se han recaudado servirán para llenar los depósitos, poner la embarcación a punto y pagar a los tripulantes. En el ánimo de los propietarios figura ahora la puesta en marcha de diversos proyectos en Galicia sobre la base de «que este es un motor al que se le puede sacar rendimiento económico», en un claro mensaje dirigido a las autoridades.

Tanto Jacobo como María José quieren llenar de contenido la vida del vapor, para lo cual se proponen colaborar con las federaciones, organizar talleres de carácter medio ambiental y actos culturales... Incluso están dándole vueltas a la posibilidad de crear una asociación cuyos socios sufraguen los gastos de mantenimiento del barco.

Entretanto, lo que es seguro es que recibirán las visitas de muchos de los donantes que participaron en la cuestación de los dos últimos meses. Unas visitas que a buen seguro recibirán con cariño Jacobo y María José. Al fin y al cabo, sin su inestimable apoyo no habría sido posible la vuelta a casa.