PSOE, BNG y EU reclaman al alcalde que intervenga y ponga fin al conflicto que enfrenta al concejal con la policía local
19 feb 2013 . Actualizado a las 15:37 h.La denuncia presentada por un agente de la Policía Local de O Grove contra el concejal Fredi Bea, al que acusa de quitar multas, ha abierto una nueva herida en el gobierno local. Lejos de entrar a valorar la inocencia o culpabilidad del edil de Seguridade Cidadá, ya que serán los tribunales los que se encarguen de ello, los tres partidos de la oposición se muestran más preocupados por la situación de enfrentamiento que Bea mantiene con la Policía Local. «Esto debería solventarse a nivel político. E nós preguntamos ¿onde está o alcalde?», asegura José Cacabelos, del PSOE.
Para los socialistas, el regidor es el máximo responsable de personal del Concello y, por lo tanto, «pode retirar as competencias se un concelleiro é incapaz de resolver unha cuestión», explican. No entienden, pues, cómo Pérez no toma cartas en el asunto para acabar, de una vez por todas, con la situación de enfrentamiento.
La misma opinión comparten en el BNG. «Cando empezou toda esta galerna pedímoslle ao alcalde que lle retirara as competencias provisionalmente», argumenta su portavoz, Heladio Outeiro. Y es que «o responsable dun corpo non pode estar dirimindo as cousas no xulgado». Por eso pide «a Miguel Pérez que exerza de alcalde dunha vez, porque non pode ser que un concelleiro estea tirándose os trastes á cabeza co seu persoal», añade. En su opinión, esta situación «crea desconfianzas e suspicacias e moitos encontronazos».
En Esquerda Unida, por último, consideran que «Bea meteuse nun terreo pantanoso» al enfrentarse con la policía. Ahora «estánselle acumulando os problemas e é incapaz de controlar a situación pola súa actitude autoritaria». En opinión de Xan Lamelas, portavoz de esta formación, el edil «está incapacitado para xestionar a policía do Concello do Grove». Esquerda Unida considera que el edil debería haberse reunido con la Policía Local cuando comenzaron los problemas para, de esta forma, evitar que el enfrentamiento siguiese agrandándose. Pero, sostiene, «se a policía coñece un delito ten a obriga de denuncialo».