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El albariño: un vino, infinitas posibilidades

CARLOS CRESPO JOSÉ LUIS VILANOVA

AGRICULTURA

MONICA IRAGO

12 ene 2013 . Actualizado a las 06:45 h.

Si a José Sineiro le dicen, a mediados de los 80, cuando habilitó una pequeña bodega en el bajo de su casa para dar salida a la producción de albariño tradicional que elaboraba la familia, que allí iba a nacer el primer espumoso de Rías Baixas, cuando menos habría puesto gesto de perplejidad. Sin embargo, hoy, Lagar de Besada puede presumir del honor de haber abierto un camino que ya otros se han apresurado a seguir. Burbujas de Baladiña es uno de los frutos del espíritu inquieto, del afán investigador y del carácter emprendedor de la enóloga María Sineiro, hija del fundador de la bodega. Pero no el único. Desde que en el 2003 asumió la gestión de la bodega familiar, Lagar de Besada ha experimentado un desarrollo en su concepto y en su proyección que la ha llevado a situarse como un referente en cuanto a las posibilidades de evolución y comercialización del albariño.

Un concepto que María Sineiro basa en el hecho de que «partiendo de unos determinados conocimientos podemos obtener muy distintos aromas y muy diversas complejidades en el vino». Un concepto que busca aprovechar todos esos matices que el albariño es capaz de proporcionar. «Lo que intento es trasladar a mis vinos mi forma de entender la viticultura y la bodega», nos dice.

Y aunque las Burbujas sean -por el momento-la guinda del pastel, el producto que ha dado mayor proyección mediática a la bodega, sería injusto no valorar en su justa medida el intenso y concienzudo trabajo, siempre basado en el respeto al buen hacer tradicional, que la familia Sineiro, apoyada ahora también por David Ballesteros, viene realizando con el albariño, tanto en los propios viñedos como en su elaboración e incluso con su conservación y crianza en bodega.

De ese trabajo ha surgido una gama que abarca la práctica totalidad de momentos que pueda tener un vino.

El nombre de la bodega, Lagar de Besada, sigue siendo el que figura en la etiqueta del albariño que cada año sale al mercado tras permanecer un mínimo de seis meses en depósito con unas lías muy finas.

Baladiña es un albariño carnoso y con cuerpo procedente de un viñedo con más de 30 años, que es sacado al mercado tras una crianza en depósito de un mínimo de doce meses y un embotellado tardío.

La joya de la bodega es Añada Baladiña, una producción limitada a no más de 10.000 botellas elaboradas solo con cosechas excepcionales. El que ahora se comercializa procede de la del 2004 y ha permanecido sobre lías un mínimo de 24 meses, más otros tantos en reposo en botella. El resultado es un albariño con ese color amarillo dorado -que tanto echamos de menos en los Rías Baixas actuales-, carnoso, sofisticado y con carácter.

La gama se completa con Burbujas de Baladiña. Las primeras botellas se comercializaron en diciembre del 2006, convirtiéndose en el primer espumoso elaborado a partir de uvas albariñas 100 %. Las aproximadamente 3.800 botellas que se comercializan se elaboran siguiendo un proceso absolutamente artesanal. ¿Qué le aporta la uva albariña al espumoso?, le preguntamos a su creadora. «Por su acidez y sus aromas y por tener las burbujas muy integradas lo hacen muy sedoso en boca. Es un espumoso muy vinoso pero con esa chispa de burbujas que siempre se agradece», nos explica.

El afán de María Sineiro por ir un paso más allá en las posibilidades del albariño la ha llevado también a crear Gelee de Baladiña, una exquisita confitura elaborada a partir de una reducción del vino con ciertos aromas a cítricos añadidos.

¿Quién sabe qué será lo próximo? ¿Qué tesoro guardan las cubas de Lagar de Besada? María no suelta prenda, pero conociéndola, seguro que no tardará mucho en deleitarnos y cautivarnos con otra sorpresa.

FICHA

LOCALIZACIÓN

Calle Pazo, 11. Xil - Meaño. Telf.: 986 747 473

ENÓLOGA

María Sineiro

MARCAS

Lagar de Besada. Baladiña. Añada de Baladiña. Burbujas de Baladiña (espumoso)

OTROS PRODUCTOS

Gelee de Baladiña. Licor de hierbas, licor café y aguardiente de caña Baladiña

ENOTURISMO

La bodega se complementa con un hotelito rural con seis coquetas habitaciones con baño y magníficas vistas al valle de O Salnés