Abre el segundo tramo del corredor del norte, del que aún faltan 95 kilómetros

S. Serantes VIVEIRO/ LA VOZ

VIVEIRO

Pepa Losada

A Mariña, Ortegal y Ferrolterra esperan por un vial anunciado al empezar el siglo

11 ene 2017 . Actualizado a las 11:23 h.

Este martes por la tarde se abrió al tráfico el segundo tramo del corredor Barreiros-San Sadurniño, los 7,9 kilómetros que van de Area (Viveiro) a Beltrán (Xove). Está operativo tres años y medio después de estrenarse el otro, los 8,4 kilómetros de la variante de Ortigueira. Quedan otros nueve por construir, en A Mariña, Ortegal y Ferrolterra. Sigue en trámites y sin fecha, aunque la Xunta ha presupuestado 2,7 millones este año para la circunvalación de Viveiro. Desde que a principios de siglo se anunció el corredor para compensar al norte gallego por el desvío de la Transcantábrica hacia Vilalba, se han construido 16 de sus 111 kilómetros: faltan 95.

Alberto Núñez Feijoo, titular de la Xunta, presidió a mediodía la apertura oficial del trayecto Area-Beltrán. Costó 50 millones y es realidad pese a las «dificultades» porque, según el presidente de la Xunta, «nunca antes Galicia se enfrontara a unha disminución dos ingresos coa intensidade dos últimos oito anos», y también porque las obras fueron «francamente complicadas».

Un ingeniero concretó que hubo desmontes de tres millones de metros cúbicos, casi todos en roca granítica. El tramo tiene dos carriles, tres en zonas de pendiente, y cinco viaductos que suman 648 metros, el más alto de 65 metros. Cuenta con tres pasos inferiores, uno superior y tres rotondas: en Area, para Viveiro; en Parceiros, para Xove; y en Beltrán, para San Cibrao.

«É unha vía necesaria, agardada, supón a vertebración desta zona da Mariña», recalcó el presidente de la Xunta. Reconoció que el trecho Area-Beltrán «conforma unha parte dun proxecto moito máis ambicioso», la vía de altas prestaciones San Cibrao-San Sadurniño. Son los 78 kilómetros que se comprometió a construir la Xunta, y ha hecho 16.

Ahora que los 3.400 vecinos de Xove tienen circunvalación, la Xunta «ten que seguir traballando e asumir o compromiso de proseguir cara á provincia da Coruña, cara á Viveiro, o gran embude, por iso a súa variante é a nosa prioridade, o próximo obxectivo». Con 15.600 habitantes, Viveiro rechaza la variante elegida por la Xunta en el 2010, por lo que Feijoo propone ahora «concretar un trazado intelixente»..

También a principios de siglo, el Gobierno central se comprometió a construir otro trecho del corredor del norte, 33 kilómetros de Beltrán a Barreiros, para enlazar ahí con la A-8. De esos tres tramos, lo último que se sabe es que Fomento preparaba el proyecto Barreiros-Foz, pero sin plazos ni presupuesto. Respondiendo a las reivindicaciones del alcalde de Xove, Núñez Feijoo declaró que a la Xunta le «toca defender os intereses lexítimos, obxectivos e incuestionables da Mariña diante da Administración central» para que haga su parte.

Plante de la regidora de Viveiro

A la inauguración de mediodía no acudió el gobierno socialista de Viveiro, «como mostra do descontento co trato recibido da Xunta». Por la tarde, la alcaldesa viveirense firmaba un comunicado con su homólogo lucense de Ourol, también socialista, y con los coruñeses de Ortigueira, Cariño, Cedeira, Cerdido, Moeche, San Sadurniño, Valdoviño, Neda, Narón y Ferrol. Censuran «a falla de compromiso e inacción» de la Xunta con el corredor, recordando que cuando se comprometió su construcción se anunció que estaría rematado «fai unha década», en el 2007, fecha inicial que se fue aplazando al 2011, al 2013 y al 2017, pero ahora nadie apunta plazos. Los regidores critican a la conselleira de Infraestruturas, quien acompañó a Feijoo a A Mariña, por incumplir compromisos que adquirió hace 8 meses con ellos y, por tanto, emplazan al presidente de la Xunta a que los cite para «desbloquear a construcción desta vía».