Imputan a una madre por herir a su suegro para llevarse a su hija

La Voz VIVEIRO / LA VOZ

VIVEIRO

XAIME RAMALLAL

El anciano está lesionado, su nuera niega la agresión y el bebé sigue con los abuelos

10 may 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

Quedó en libertad, tras comparecer en el juzgado de instrucción número 2 de Viveiro, una viveirense que está acusada de golpear a su suegro, causándole lesiones que precisaron 22 puntos de sutura en la cabeza y alguno en el codo. Está imputada por un delito de lesiones y allanamiento de morada con violencia. Delitos que supuestamente cometió cuando acudió al domicilio de sus suegros en Xerdiz (Ourol) para llevarse a su hija. La pequeña se encontraba en la casa de sus abuelos, donde también vive su padre, con el que la acusada lleva alrededor de un año separada, aunque el juicio por el divorcio no se celebró todavía.

Las lesiones del abuelo son reales, pero las versiones de lo ocurrido difieren. Los abuelos aseguran que la mujer se presentó en la casa a primera hora de la mañana del jueves, acompañada de un amigo que había conocido en un pub. Entraron aprovechando que los dos hijos de la casa habían dejado la puerta abierta tras marcharse al trabajo. Cuando el abuelo bajó a la cocina, según su versión, se topó con los intrusos, que lo empujaron contra la puerta y la pared, golpeándolo. La abuela, que estaba arriba, (tienen la cuna en su habitación), oyó ruidos y bajó. Antes, para evitar que la nieta la siguiera, le dijo que iba al servicio. Bajó y se encontró a su marido tirado en el suelo y vio que los intrusos subían al cuarto. Cerró la puerta que da acceso a las escaleras y salió a pedir auxilio. Cuando regresaba los vio llevándose a la niña. Al parecer, se fueron en coche a Foz y luego la acusada regresó a Celeiro (dicen que en taxi) para dejar a la niña en casa de su madre. Se enteró de que la buscaban y se personó en la Comisaría de Viveiro, donde se hizo cargo de ella la Guardia Civil. Niega haber entrado en casa y haber agredido al suegro. La jueza le otorgó provisionalmente la custodia al padre y ella puede verla los sábados en el punto de encuentro de Lugo. Tiene orden de alejamiento de los suegros.