Modernizar la fábrica «implica reducir personal», ahora toca negociar
24 mar 2015 . Actualizado a las 05:00 h.Ayer por la mañana, tal como estaba previsto, se formó la mesa de negociación entre el comité de empresa y la dirección de Vestas. A partir de ahora habrá que negociar en base a un calendario fijado. Sobre la mesa, como saben, hay dos EREs: uno de extinción (despidos) que afectaría directamente a 54 trabajadores y un segundo ERE temporal para el resto de la plantilla, 94 empleados.
Unas 150 familias de Viveiro están muy pendientes de lo que suceda en Vestas. Existe el lógico pesimismo y decepción entre la plantilla ya desde el momento en que la dirección de Vestas presentó la propuesta de los dos EREs.
Desde la dirección ven necesaria una transformación y modernizase para producir generadores de última tecnología; dicen que invertirán en ello un millón de euros. Pero en ese proceso sobra plantilla.
El comité por su parte lo ve como «un recorte puro e duro, queren botar a un tercio da plantilla; din que vai haber menos carga de traballo e que non fai falla tanta xente porque fabricar o novo xenerador levará menos horas de traballo. Nós o que decimos é que hai que esperar, que non se despida á xente antes de saber a que vai facer falla».
«Tamén teñen intención de contratar a una empresa de fóra para encargarse do departamento de almacén, co cal sobraría a xente dese departamento. En fin, agora hai que negociar coa empresa e valorar tamén outras opcións, como prexubilacións ou mesmo recolocacións para algúns compañeiros noutros centros de traballo. Todo iso é o que se vai tratar precisamente nestas negociacións», señalaba Julio L. Cribeiro, presidente del comité de empresa. Tras la reunión con la empresa ayer se celebró en la fábrica una asamblea informativa de trabajadores. Se barajaron medidas a adoptar, entre ellas pedir apoyos políticos y convocar si es necesario protestas.